El FC Barcelona se ha venido recuperando en los últimos tres veranos después de un lustro en el que se complicó muchísimo ante su mala relación de ingresos y gastos por sueldos a futbolistas del primer equipo, y los gastos generados por todas las secciones del club. Es por ello que Joan Laporta, una vez asumió nuevamente la presidencia de la entidad, intentó trabajar basándose en un plan de austeridad que permitía seguir a la entidad siendo competitiva, pero intentando recuperar oxígeno en su masa salarial.
Finalmente, tras tres años de trabajo, el Barça consiguió en la pasada temporada, la 2023-24, reconducir la masa salarial del club hasta un gran 60% respecto a los ingresos, situándola en 492 millones. Todo este necesario esfuerzo supuso reducir unos 180 millones la masa salarial del periodo más álgido, algo que en los despachos esperan poder mantener en el futuro a corto y mediano plazo.
El Barça está listo para mantenerse en su buen momento con el 'fair play' financiero
Así lo explica el exvicepresidente económico Eduard Romeu, señalando en 'Sport' que la entidad ha tenido que sacrificar aspectos muy importantes dentro del club, pero una vez superados, debe mantener ese equilibrio. Es por ello que aunque el club viene de una temporada sin títulos, la idea es que el Barça mantenga su postura de gastos e inversiones controladas, siempre pensando en respetar las ideas que lo han llevado hasta este positivo momento en los despachos, no importa el nombre que esté sobre la mesa.
El conjunto catalán entiende que ahora deb apostar por la cantera, una que la pasada campaña demostró nuevamente ser una fuente importante de talentocon la aparición en el primer equipo de jugadores como Lamine Yamal, Pau Cubarsí, Fermín o Héctor Fort. Así, el Barça quiere continuar con su apuesta, saliendo de contratos que puedan ser complicados, siendo firmes en sus renovaciones y dejando claras sus condiciones cuando moverán ficha por algún objetivo de mercado.