Las obras del Spotify Camp Nou continúan 'adelantando' a su propio calendario

La constructora turca Limak ha recortado en un mes la fase de demolición del Spotify Camp Nou. Y es que aunque la obra está todavía en fase incipiente, la organización percibirá un bono que rondará el millón de euros debido a que avanza con hasta cuatro semanas adelanto frente a los planes originales, según avanzó 'Sport' este lunes.

De hecho, la información apunta que el director del área de operaciones del Espai Barça, Joan Sentelles, explicó que el derribo de la vieja estructura terminó con alrededor de cuatro semanas de antelación, un hecho conseguido hace unos 20 días por la constructora turca, una fecha que según señala el dirigente del FC Barcelona necesita definirse entre ambas partes para así llegar al monto exacto del bonus a pagar.

Más allá del derribo de la tercer gradería, se retiraron todos los asientos y se hizo el 50% de la excavación alrededor de la infraestructura. Fue posible gracias a que el pacto se firmó con la previsión de trabajar de lunes a viernes y los operarios también están en el Camp Nou la mayoría de los sábados. Y aunque está previsto mantener las jornadas de ocho de la mañana a ocho de la tarde, el club admite que se pueden prolongar de manera puntual hasta las diez de la noche.

El Barça tiene muy en cuenta seguir cumpliendo con su hoja de ruta

Desde la entidad azulgrana se fijaron como prioridad pasar el máximo tiempo posible fuera del estadio para que la primera etapa estuviese lista sin mayores presiones, aunque sí dejando claro que para noviembre de 2024 esperan estar de regreso. No obstante, en el sector se daba por muy complicado que se pudiera cumplir. De hecho, la agencia de rating Kroll –que hizo la valoración de la financiación del Espai Barça- realizó sus cálculos asumiendo un año de retraso en los trabajos. De momento, y con el 7% de la obra ya hecha, no se ha producido incumplimiento alguno.

El calendario es vital para el club, pues cada día fuera del Camp Nou es una disminución de ingresos. Por ello, incluyó también una penalización para Limak de un millón de euros al día por cada jornada de retraso a la hora de entregar el campo, que debería estar completamente finiquitado al cien por cien en agosto de 2026 con un plan para noviembre de 2024 de tener una capacidad de 65.000 personas, frente a los 104.600 que tendrá al final de todas las obras.