El 7 de marzo sigue en el calendario con un bombillo rojo en las instalaciones del Barcelona, con unas elecciones que parecen ser las más oportunas, rocambolescas y accidentadas en la historia del club, luego de la salida de Bartomeu por Moción de Censura y su reciente detención por parte de las autoridades.
Ya está libre el ex presidente culé pero no el camino a las elecciones, que se esperaba pudiese ser presencial tras la petición realizada por el club a la Generalitat de Catalunya el pasada viernes, pidiendo permiso para que los socios del Barcelona pudiesen saltarse el confinamiento y respetando las medidas de bioseguridad, sufragar en vivo.
22811 socios decidieron hacer su voto vía correo, tal vez como prevención a esta posibilidad o simplemente porque les pareció más cómodo. Sin embargo el grueso del padrón electoral culé esperaba tener contacto con las instalaciones, algo que no se podrá llevar a cabo luego de confirmarse la negativa de las autoridades con una cuarentena que se extendió al menos hasta este domingo, fecha de los comicios.
Barcelona (Camp Nou y Palau Blaugrana), Tarragona, Lleida, Girona, Tortosa y Andorra la Vella son las sedes que esperan por la información oficial del club en relación a la cantidad de votantes que ejercerán allí su derecho al voto. Este comunicado se espera para miércoles de esta semana a más tardar.
A través del correo electrónico, el club se ha encargado de comunicar a cada uno de sus socios cuál es el lugar, mesa y horario recomendado en el que deben asistir a votar, aunque esto último no es una obligación ya que las mesas tendrán actividad durante 12 horas, desde las 9 de la mañana hasta las 21.
Incertidumbre electoral
Los últimos días vienen con bastante movimiento en este tema dentro del seno del Barcelona, ya que la inspección de las autoridades locales a las instalaciones y la comparecencia de Bartomeu ante las mismas generó un clima bastante tenso. Con la situación aparentemente normalizada, se espera saber cuál será la medida final a tomar para poder ir a votar, tomando en cuenta que no hay permiso para saltarse el confinamiento.
Los socios que decidan ir a votar, no estarán exentos de sanciones o multas por partes de los Mossos, ya que el documento enviado por el club solo consta la autenticidad de su condición como socio y al mismo tiempo, el lugar donde debe votar, pero legalmente no tienen permiso de movilización.