El FC Barcelona no pudo llevarse el Clásico ante el Real Madrid (1-2). Fue un duelo en el que el combinado de Xavi Hernández dominó tanto las acciones como el marcador desde muy temprano, con la anotación de Ilkay Gündogan al minuto seis. Sin embargo, el elenco barcelonés adoleció de contundencia, a diferencia del conjunto merengue, donde Jude Bellingham aprovechó las escasas dos oportunidades que tuvo y las convirtió en goles.
A pesar de esto y de ser un encuentro con varias ocasiones interesantes para ambos equipos, quedará en la memoria una de las jugadas más polémicas del partido entre blancos y azulgranas. Se trató de un fallo arbitral cuestionable que, sin lugar a dudas, cambió el rumbo del enfrentamiento.
En el minuto 46, el Barça tuvo un córner a su favor y, como es habitual en estas situaciones, hubo un revuelo en el área. En ese momento, el francés Aurélien Tchouaméni, jugador a servicio de los merengues, realizó una marcación excesivamente dura a Ronald Araújo, zaguero azulgrana, agarrándolo duramente del cuello y evitando que el uruguayo pudiera cabecear correctamente, terminado la acción con el charrúa en el suelo a consecuencia de la desestabilización.
Para el árbitro no hubo ni infracción sobre Ronald Araújo
A pesar de esta acción, el colegiado Jesús Gil Manzano consideró que no merecía amonestación y, aunado a esto, el árbitro asistente de video (VAR) no llamó al juez principal para revisar la jugada, dando posteriormente por terminadas las acciones en la primera mitad del encuentro entre azulgranas y merengues.
Esta acción ha representado un momento crucial en el desarrollo del encuentro, ya que el FC Barcelona pasó de tener posiblemente un penalti a favor que podría haber significado el 2-0, en un momento clave del duelo justo antes del descanso. Esta situación habría tenido un impacto emocional importante y también existía la posibilidad de una posible expulsión del centrocampista francés debido a la dureza y contexto de la acción. No obstante, al finalizar la primera mitad, el elenco merengue se fue al descanso con un marcador adverso relativamente corto y tuvo la oportunidad de replantear el partido de cara a la segunda mitad.