Luego de ser diagnosticado con un esguince de tercer grado en el ligamento lateral interno y una lesión parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, Gerard Piqué se ha apartado de los terrenos de juego y ha visto como su evolución será la que delimite realmente el tiempo que deberá estar de baja. A pesar de ello, el exjugador del Manchester United sigue haciendo todo lo que está a su alcance para volver lo antes posible a los terrenos de juego.
A pesar de la satisfactoria irrupción de Ronald Araújo y de Óscar Mingueza, dupla de jóvenes defensores centrales provenientes de la cantera, en el primer equipo, la vuelta de Piqué se torna fundamental dada la falta de confianza en los demás efectivos de la zaga central del equipo dirigido por Ronald Koeman. Lenglet ha sido sentado por el gran rendimiento de los chicos de La Masía y Umtiti, con sus recurrentes lesiones, no es una garantía.
A propósito de us misma situación, en el marco de la gala en la que se le otorgaba el premio al Merit Esportiu Català por parte de la Generalitat de Catalunya, Piqué comentó lo siguiente: “Intentamos hacer paso a paso las cosas correctamente y la intención es volver lo más pronto posible. Sé que es una lesión que no es fácil, pero qué le vamos a hacer. A luchar y a intentar ayudar al equipo lo más pronto posible,”
Adicionamente, sobre la inclusión de Araújo, Mingueza y los demás canteranos que forman parte del primer equipo del Barcelona en este momento, el exjugador del Manchester United recalcó: “Está saliendo gente muy buena de la cantera, jugadores a los que el míster va dando confianza. Poco a poco, con confianza y responsabilidades, tendremos muy buenos jugadores en el futuro próximo, más los que ya tenemos, que tienen un nivel muy alto. Yo estoy muy confiado, las sensaciones son mejores que los resultados y creo que tiraremos adelante”.
Piqué, influyente fuera y dentro de las canchas
Con más de 10 años en el FC Barcelona, Gerard Piqué ha logrado hacerse con una gran jerarquía dentro del terreno de juego, gracias a su actitud, compromiso y garra, situación que aporta una gran dosis de confianza al cuadro culé sin importar el rival. Sin embargo, el central también ha conquistado un gran posicionamiento dentro del vestuario azulgrana, siendo uno de los capitanes del equipo y uno de los futbolistas más respetados.
Ambas situaciones son notables a simple vista. En especial, con la evidencia de que Piqué, antes de su lesión en el partido ante el Atlético de Madrid, había participado en todos los compromisos del Barcelona. El jugador de 33 años solo se había ausentado en el enfrentamiento ante la Juventus, en Turín, ya que estaba sancionado y no podía jugar de ninguna manera.