Con la recuperación de Ousmane Dembélé como gran foco de atención, ha pasado algo desapercibida otra gran noticia en la plantilla del FC Barcelona, también referente a uno de sus lesionados. Rafinha Alcántara ha mostrado en las redes sociales su alegría por estar más cerca de volver a jugar, después siete meses alejado de los terrenos de juego.
Le ha costado una larga ausencia y dos intervenciones en la rodilla derecha, pero el brasileño podría haber olvidado sus problemas y empieza la recta final de su rehabilitación. En los últimos días, al centrocampista se le ha podido ver en la Ciudad Deportiva ejercitándose sobre el césped bajo la atenta mirada de Juanjo Brau, uno de los fisioterapeutas del club.
Aunque todavía sigue al margen del grupo, Rafinha ha dado un paso adelante tras mucho tiempo de esfuerzos en el gimnasio y sometiéndose a tratamientos especiales, como algunas actividades en la piscina para reforzar su musculatura. "Acaba una etapa y comienza otra. Agradezco por todo lo que he recibido y todo lo que aún esta por llegar... Gracias", ha comentado el jugador en las redes sociales, acompañando a un vídeo en el que se puede ver la evolución de su trabajo en los pasados meses.
Carácter férreo
No son pocos los compañeros en el vestuario del Barça que han destacado la actitud de Rafa Alcántara, que se ha machacado un un durísimo proceso tanto a nivel físico como a nivel mental. Pocos días después de otro golpe familiar con la lesión de su hermano Thiago, el futbolista azulgrana ha ido compartiendo sus buenas sensaciones.
"Recuerda mi orden: ¡Sé fuerte y valiente! No estés desanimado, ni tengas miedo, porque yo, el Señor, tu Dios, estaré contigo en cualquier lugar donde vayas #BackStronger", era el mensaje que el brasileño compartía hace unas horas, volviendo a hacer referencia, como en todos estos meses, a que pretende volver más fuerte que nunca.