La 'rajada' de Pjanic contra Koeman: "Me ha faltado al respeto"

Este jueves se confirmaba que el FC Barcelona había llegado a un acuerdo con el Besiktas para la cesión de Miralem Pjanic por una temporada. El bosnio, que no entra en los planes de Ronald Koeman y estaba destinado a estar en el banquillo, entendió la situación y decidió que prefería marcharse a algún equipo en el que sí pudiese jugar. Ahora, desde Estambul, ha analizado su complicado paso por el conjunto blaugrana. 

En una entrevista ofrecida al diario 'MARCA', Pjanic ha hablado sobre toda su experiencia con el Barça, desde que era pequeño y le gustaba el juego de los culés, hasta sus últimos días vistiendo la elástica blaugrana, los cuales fueron una pesadilla. Tras reconocer se marchó porque "no podía aceptar una situación como la que pasé el año pasado. Estaba muy claro para mí que no quería eso, porque soy un futbolista al que le gusta mucho siempre jugar, es lo que me hace feliz", el futbolista de 31 años reconoció que la filosofía del club catalán siempre le llamó la atención.

"Quería ese 'challenge', era el momento justo para intentarlo... Pero me encontré un entrenador que no sé"

"Está claro que la filosofía del Barça en los últimos años se adaptaba a mi fútbol y a lo que me gusta. Y cuando estaba dentro del Barça cuando ves a los jugadores te das cuenta de que era eso que estaba soñando desde afuera", explicó, antes de desvelar cómo vivió la etapa antes de su llegada a la Ciudad Condal, confirmando que "estaba listo para dar este paso y probar este nuevo reto, tras nueve años en Italia, quería ese challenge, era el momento justo para intentarlo. Pero me encontré un entrenador que no sé", refiriéndose a Koeman.

Dardos a Koeman

El centrocampista bosnio no se explica qué pasó con su etapa en el Barça y porqué Koeman no le dio oportunidades de jugar y demostrar su potencial. "Era yo quien iba a preguntarle qué quería de mí, de esta posición, qué estoy haciendo mal o bien para saber, por adaptarme más rápido dentro de equipo, paras ser útil...", confesando que para el de Zaandam "no había problemas en mi juego, no me daba respuestas" y que con el pasar del tiempo, la situación era peor, aunque él se mantuvo en una postura muy profesional siempre.

"Necesitas la confianza, el diálogo, que te digan las cosas a la cara, que Koeman nunca me las ha dicho"

Añadió que fue una situación "muy difícil de comprender", destacando que dentro del club habían personas que no entendía lo que estaba pasando, por lo que no dudó en aceptar cuando se presentó la oportunidad de recalar en el Besiktas en calidad de préstamo. "Salió esta oportunidad [Besiktas], la quería escuchar. Quiero jugar, estoy seguro de mi calidad, sé muy bien lo que puedo aportar a un equipo", pero que para ello "necesitas la confianza, el diálogo, que te digan las cosas a la cara, que nunca me las ha dicho".

Continuó diciendo que hubiese preferido que le "dijeran las cosas directamente, pero es así. Ha sido una forma de comunicar muy extraña, es la primera vez que vivo esto. Nunca he tenido problemas en ningún equipo, con ningún entrenador, creo que tengo muy buena relación con todos los entrenadores...", insistiendo en que no sabía qué había pasado, pero que faltaba responsabilidad y no quería confontación "porque seguramente no sabía gestionar eso".

Complicado desde el comienzo

Pjanic se refirió a que su inicio en el Barça fue complicado, comenzando con que llegó a un club nuevo, con un entrenador nuevo dos semanas más tarde que todos por la situación de la pandemia. "Empiezo a entrenar poco a poco, solo, para prepararme con el preparador físico, e ir entrando con los compañeros. Y nada, pasan dos, tres, cuatro, siete, 10 días y el míster nunca vino para hablar un poco de lo que pensaba de la temporada, de mí, para hablar simplemente, para introducirme dentro de un equipo, como hace el resto".

"Cuando no juegas es difícil física y mentalmente estar bien, porque te está matando la confianza"

Pensó que sería algo pasajero, pero la situación era complicada. "Estaba muy bien, jugando mis partidos, pero claro, quería más, para dar más por el equipo. Soy una persona que siempre quiere el máximo y dar más", resaltando que "cuando no juegas es difícil física y mentalmente estar bien, porque te está matando la confianza, porque no tienes comunicación con él".

Habló también de que fue titular en la Champions League, en fase de grupos, pero en LaLiga se quedó completamente por fuera. "Era muy difícil de aceptar, he esperado hasta el final para tratar de cambiar las cosas, pero nada. Jugué todos los partidos en Champions, ganamos 0-2 en Turín, llega LaLiga... y fuera".

Así, en su opinión, es muy cuesta arriba entender qué quiere el entrenador. "Yo iba a preguntarle, iba a verle, 'míster, estoy haciendo algo mal, mi actitud es mala, qué quieres exactamente de mí', para preguntar qué puedo hacer, por saber". Koeman le respondía que "'No, no, 'Mirem', es solamente rotación, no tengo ningún problema, tu actitud es buena...", pero que igualmente le dejaba siempre fuera. 

El bosnio apuntó que "me hubiera gustado que me dijera a la cara no eres para mí. El cara a cara no existió y no lo entiendo", así como que buscó un interlocutor para encontrar una solución, pero que casi al final fue para "decirme que entienden mi decepción, que me ven entrenar y estoy bien, pero no pueden hacer nada. Que no pueden meterse dentro de las cosas del míster. Pero ninguno entendía. Me agradecían la actitud y el profesionalismo". 

"No era al único al que le pasaba..."

El ex de la Juventus se refirió a que él no fue el único que vivió esa complicada situación con Koeman, refiriéndose a los casos de Umtiti, Junior Firpo, Riqui Puig... pero que no quería hablar de ellos. "¿Cómo cree que estaba? De finales de febrero hasta mayo no jugué casi nada. Estaba muy decepcionado, triste, pero menos mal que soy un chico así, podía haber dicho 'tengo tres años de contrato y pase lo que pase no me importa'. Pero no soy así. Es una situación muy difícil de aceptar, pero voy a luchar en los entrenos, cuando pueda entrenar fuerte lo haré, para mí, porque esta persona ahí no va a cambiar nunca". 

"Podía haber dicho 'tengo tres años de contrato y pase lo que pase no me importa'. Pero no soy así"

Allí fue cuando 'rajó' contra Koeman, apuntando que "el entrenador, la cosa más grave, creo que es una falta de respeto sobre el grupo, era esto. Los que no juegan después de los partidos hacen un entreno fuerte, bueno, mientras que los titulares recuperan para el próximo partido. Estos que no juegan, la cosa grave para mí es que este entrenador no estaba nunca ahí para ver la actitud de esos futbolistas que no juegan". 

Pjanic se pregunta "¿Cómo un jugador puede motivarse o decir 'estoy aquí'? ¿Cómo puedo cambiar las cosas si él no viene a ver cómo entreno o qué actitud tengo?", añadiendo que  "esto es una cosa, una de las más brutas [feas] que he visto, para mí es una muy grande falta de respeto. Estábamos luchando, no estaba fácil para los que no jugábamos, y él no ha estado ahí en toda la temporada".

La carta de libertad

En otro punto, habló de la carta de libertad que le habría propuesto el FC Barcelona. "Es una pregunta para ellos, no para mí. Siempre he entendido los problemas de todos. En la vida, todos los tenemos", pero qu hay formas de encontrar una solución en conjunto. "No soy un chico estúpido, entiendo todo, pero siempre comunicando con el máximo respeto, es como se tiene que hacer".

Su rebaja salarial actual del 60% no ha sido la única ayuda que ha dado al club, confirmando que "antes de venir al Barça ya hice un esfuerzo, ganando menos que allí. Pero no soy de los que les gusta hablar de esto". Finalmente, desea que "el Barça lo haga muy bien en el futuro, económicamente y deportivamente. Deseo que mis compañeros ganen muchos títulos, se lo merecen. Son jugadores de alto nivel y calidad. Pero sabemos que están en una situación económica complicada, espero que pronto las cosas sean mucho mejor".