Ronald Koeman gana confianza y dirige al Barça a la excelencia

El rendimiento del FC Barcelona en los últimos tres meses ha sido el resultado de la confianza depositada en Ronald Koeman a pesar de que en el comienzo de la campaña estuvo muy discutida su figura. El neerlandés ha revolucionado al equipo, convirtiéndole en el candidato más peligroso de LaLiga a llevarse el título. Sus cambios de dibujo, rotaciones y confianza en sus jugadores ha sido la gran clave.

Tras la goleada de los culés en Anoeta, Koeman reconoció que su proyecto en el Barça necesitaba tiempo y apuntaba que si bien era cierto que el equipo tuvo dificultades al comienzo del curso, habían mejorado en este año. ¿La razón? El neerlandés explicó que "los equipos necesitan tiempo para conocer al entrenador y al staff. A veces hemos cometido errores en defensa, nos ha faltado eficacia...", pero sus cambios han surtido el efecto esperado y, finalmente, los resultados son positivos. 

Una de las variaciones más importantes del Barça ha sido el cambio de sistema hasta encontrar el dibujo que más beneficie al equipo y cada jugador en específico. Koeman apenas llegó al Camp Nou apostó por el 4-2-3-1 que, ante los 'grandes' (el Madrid, Atleti o Sevilla) le pasó muchas facturas. El equipo era muy impredecible y cometían muchos fallos en la zaga defensiva, que les castigó en gran parte del arranque de la campaña. Desde entonces, probó el 4-3-3, el 3-4-3, con Sergio Busquets entre los centrales y Jordi Alba y Sergiño Dest más adelantados e incluso el 4-1-4-1 (ante el Valencia), con el centrocampista de Badía de pivote, pero no ha sido hasta el último mes cuando el neerlandés ha dado, definitivamente, con la 'tecla' a nivel táctico en el Barça. 

El 3-5-2, con los laterales jugando casi como extremos, ha convertido al conjunto azulgrana en un equipo reconocible, con confianza y mucha personalidad que se presenta como el gran candidato a hacerse con los dos títulos en disputa. En este nuevo dibujo táctico, Sergiño Dest y Jordi Alba juegan mucho más adelantados, con menos labores defensivas (quedan 'cubiertos' por los tres centrales) y pueden potenciar su juego ofensivo, en lo que más se destacan. 

Pero el papel de los laterales no es lo único. Con el eje defensivo con tres jugadores, hay menos oportunidades para cometer errores, ya que juegan mucho más juntos. Además, con este sistema 'Busi' tiene que recorrer menos metros, algo que evita que se 'caiga' del partido tras una hora en el reloj. Arriba, Griezmann, Messi y Dembélé tienen mucha más libertad y oportunidades para explotar ofensivamente (que lo demostraron en San Sebastián). 

Confianza absoluta en los más jóvenes

Hay tres jugadores que se han convertido en la clave del planteamiento de Koeman, además de Leo Messi, que es indiscutible. Frenkie de Jong, Pedri González y Sergiño Dest se han convertido en el nuevo motor del Barça y grandes responsables del alto rendimiento del equipo. La confianza del neerlandés en los tres es absoluta y, definitivamente, son el presente y futuro del club catalán.

Lo más sorprendente es que los tres han encontrado su mejor fútbol, pero no superan los 21 años. No se esconden ante los 'grandes', no dudan al comenzar las jugadas y mucho menos al momento de definir sus acciones, bien sea directamente al arco rival o asistiendo a sus compañeros. Han sido una revolución y gran acierto del entrenador en su primer año en el banquillo.