El FC Barcelona finalmente mandó por la borda LaLiga en el Ciutat de València, con un 3-3 ante el Levante que le impidió conquistar el liderato de manera provisional. Ronald Koeman dispuso de siete jugadores que fueron protagonistas en aquel vergonzoso 2-8 frente al Bayern Múnich en los cuartos de final de la pasada edición de la Champions League: Marc-André Ter Stegen, Gerard Piqué, Lenglet, Jordi Alba, Busquets, Frenkie De Jong y Lionel Messi. Entre ambos compromisos ha transcurrido nueve meses, sucedió el 14 d agosto de 2020, casi una temporada después, 52 partidos disputados desde entonces.
Koeman tomó las riendas del banquillo del conjunto azulgrana con el objetivo de reestructurarlo durante un año que calificó incluso de ‘transición’. Tomó algunas decisiones trascendentales, y dolorosas para el barcelonismo, como prescindir de los servicios de Luis Suárez, una solución a su juicio necesaria aunque ahora está a un paso de titularse con su Atlético de Madrid.
El técnico holandés ha apostado por rejuvenecer al equipo, dándole entrada en el once titular a jóvenes joyas como Pedri, Óscar Mingueza e incluso Ilaix Moriba, estos últimos más por necesidades propias del equipo. Su valentía ha alcanzado el tope, aunque con la continuidad de una estructura que necesita una regeneración. En la segunda mitad del partido ante el Levante faltó ritmo e intensidad.
Aquella vergonzosa derrota frente al Bayern Múnich debió suponer un punto de inflexión, pero en el esquema salieron siete jugadores titulares que volvieron a ser el bloque del Barça de cara al final de la presente temporada: Ter Stegen, Piqué, Lenglet, Alba, Busquets, De Jong y Messi. Salvo De Jong, que tiene 24 años, y Lenglet, con 25, la mayoría ya está en proceso de relevo. Antoine Griezmann por su parte fue suplente en Lisboa y ante el Levante, Sergi Roberto, que sí lo fue, acabó de suplente y saliendo del equipo por lesión. Griezmann jugó media parte en Portugal.
El grupo persiste
Koeman ha apostados por un grupo de jugadores, casi el mismo que siempre ha sido utilizado, sin disponer siquiera de un plan B. Pjanic, fichado para ser un refuerzo de lujo, acumula ya 14 jornadas sin jugar, Junior Firpo lleva 3 minutos y Riqui Puig, que tampoco cuenta, fue el revulsivo en los minutos finales. El holandés confía en el mismo esquema, los mismos jugadores, por lo que su continuidad ahora pende de un hilo.