En ocasiones, los deportistas no solo se hacen notar por su rendimiento en la disciplina que practican, puesto que, primero que atletas, son personas y, debido a esto, sus acciones fuera de la cancha también son observadas y, para bien o para mal, también se hacen notorias. La mejor forma de desenvolverse en un deporte y en la vida misma, para los jugadores de fútbol y de otros deportes, es ser un astro y un ejemplo, tanto dentro como fuera de la cancha.

Esa misma descripción encaja perfectamente con el perfil de Marc-André Ter Stegen, portero alemán que forma parte de la plantilla del FC Barcelona desde 2014 y que ha sabido, a pulso, paciencia y trabajo duro, ganarse la titularidad, con la que no contaba desde su llegada. Pero también, el cancerbero de la selección alemana ha dado en el clavo para conquistar a la afición blaugrana con sus gestos de alto profesionalismo y, por supuesto, con un gran rendimiento.  

La última gran acción con la que Ter Stegen se ha mostrado solidario con el club para el que juega, es con su renovación y el monto que percibirá en los próximos años. Dada la delicada situación económica que atraviesa el Barcelona y el mundo entero, el ex Borussia Mönchengladbach renovó su vínculo con el club, que expiraba en 2022, hasta 2025, incluyendo en sus acciones una rebaja salarial para la presente temporada, pero un aumento para las próximas, cuando se espera que la situación del equipo sea mejor. 

Adicionalmente, el número 1 del equipo de Ronald Koeman ha puesto en riesgo su integridad física, con el fin de poder seguir jugando con el Barcelona y no dejar al equipo desamparado. Durante la campaña pasada, cuando Ter Stegen ya tenía molestias en el tendón rotuliano de la rodilla derecha, situación que lo llevó a operarse recientemente, el mismo decidió participar en lo encuentros que quedaban de la temporada y operarse cuando fuese el momento preciso y más oportuno para él y para el cuadro catalán.

La "casi" fuga de Ter Stegen 

Si bien, Marc-André Ter Stegen es, en este momento, uno de los ídolos más grande del Barcelona, la historia entre club y jugador estuvo cerca de romperse a poco tiempo de haber iniciado, puesto que, con Claudio Bravo en el arco, el alemán no tenía la titularidad asegurada durante toda la temporada. Incluso, el portero de 28 años tuvo que conformarse al principio con disputar solo la Champions League y la Copa del Rey, pero sus actuaciones destacadas llevaron al cuadro dirigido en ese entonces por Luis Enrique, a hacerse con ambas competiciones en 2015. 

Sin embargo, la situación no dejaba de incomodar a Ter Stegen, quien recibió ofertas del Manchester City para incorporarse a sus filas. El Barcelona, por su parte, se negó en todo momento a venderlo y terminó desprendiéndose de Bravo, quien fue a parar justamente al cuadro "Citizen" y dejó via libre para que el ahora guardavallas titular del equipo culé obtuviera la regularidad que necesitaba para explotar todos los dotes que demuestra en cada partido.