No duró nada la alegría del Barcelona tras el golazo de Depay, ya que en la primer jugada controlada que tuvo el Alavés llegó el empate con otra gran jugada individual para ponerle espectáculo al partido en el segundo tiempo, con un Rioja valiente que definió de gran forma el empate.
Poco se disfrutò el golazo de Depay cuando Rioja decidiò encarar a todo el mediocampo culè en una carrera que terminò con demostraciòn de habilidad, fuerza e ointeligencia al meterse entre los defensas para enfrentar a Ter Stegen, que quiso taparle el arco pero quedó regado para ver la definición del jugador.
El portero se levantó de inmediato a reclamar a sus compañeros por la pasividad, por no marcar con determinación y también por dejar el arco solo a su espalda, algo que hasta sin el regaño del alemán se podría decir, al ver a todos haciendo más la estatua que el trabajo, simplemente viendo la jugada.
Con el Camp Nou en la espalda, la novena casilla de la tabla y un empate en frente, se esperaba ver al Barcelona buscar el marcador y rematar, pero nada más lejano que eso porque los culés quedaron anestesiados ante el gol, como si hubiese terminado el juego.
Pésimas noticas
Como se esperaba, el encuento terminó con pitos del público y la preocupación por los nuevos lesionados. Piqué se marchó con problemas en la pierna derecha y se une a Araújo como bajas en defensa, dejando solo a Umtiti y lenglet como seleccionables, además de Frenkie De Jong.
El Kun preocupa un poco más porque las escenas en el partido le mostraron bastante asustado, con un dolor en el pecho que le descolocó y generó un mareo hasta tirarse en el suelo, aunque pudo salir por su propio pie. Se retiró en ambulancia del estadio y se le evaluará en los próximos días,