La situación del centro de la defensa comienza a ser un verdadero 'quebradero de cabeza' para Hansi Flick y al FC Barcelona. Al principio del verano la entidad azulgrana intentó desprenderse de varios zagueros debido al 'overbooking' existente en la posición, pero en la recta final del mercado de fichajes, la plantilla del entrenador alemán se ha quedado corta de efectivos en esta zona del campo debido a las lesiones y los traspasos.

Clément Lenglet y Mika Faye abandonaron la Ciudad Condal para poner rumbo al Atlético de Madrid y el Rennes, respectivamente, mientras que Ronald Araújo y Andreas Christensen sufrieron sendos problemas físicos que les mantendrán fuera de los terrenos de juego durante varios meses. Lista de lesionados a la que se ha unido Eric García, que padece una fascitis plantar en su pie derecho cuando su futuro en la entidad está en entredicho debido al interés del Girona.

En medio de este contexto, donde Pau Cubarsí e Iñigo Martínez son los únicos centrales disponibles en el primer equipo a día de hoy, en Can Barça tantearon la posibilidad de hacerse con los servicios de Jonathan Tah, viejo conocido de Hansi Flick, para reforzar la posición, pero el Bayer Leverkusen le cerró la puerta de salida. Los catalanes activaron su 'plan B' y le dieron inicio a los sondeos por Mohamed Simakan, aunque habría recibido noticias negativas al respecto.

Y es que el Al-Nassr de Cristiano Ronaldo querría darle un salto de calidad al centro de su retaguardia y habrían puesto la mira en el futbolista del RB Leipzig. El cuadro saudí tendría encaminado un acuerdo con el PSG por Milan Skriniar, pero ante la falta de respuesta del esloveno, estos habrían puesto en marcha las gestiones para incorporar al francés de 24 años a las filas de Luis Castro, 'amenazando' seriamente las opciones de los blaugranas, tal y como informa Fabrizio Romano.

Una operación complicada

Sin embargo, la operación del galo no es nada sencilla. Los Toros Rojos son conscientes de la importancia que tiene el jugador en el esquema de Marco Rose y habrían tasado su traspaso en una cifra que ronda los 50 millones de euros, monto que no representa problema para los petrodólares saudíes pero si para un Barça cuya economía se encuentra en un estado delicado, por lo que su fichaje sólo podía ser posible si el club cierra el acuerdo con Nike antes del final del mercado de fichajes. Ahora, las posibilidades son cada vez más escasas.