El FC Barcelona estuvo buscando delantero durante todo el mercado de invierno de 2020, pero al final decidió no fichar a nadie ante la imposibilidad de fichar a un '9' importante. Gustaba mucho Pierre-Emerick Aubameyang y sonó con más fuerza fue Rodrigo Moreno, del Valencia. Además, también se escucharon otros nombres como el de Willian José o el de Richarlison, goleador del Everton, por el que se llegó a decir que los catalanes ofrecieron unos 100 millones de euros.
El rumor de la supuesta propuesta de los blaugrana por el punta 'toffee' se acabó desmintiendo, aunque ese no ha sido el último capítulo de la posible llegada del 'killer' a España. Desde hace unas semanas, el nombre del atacante ha vuelto a colocarse en el punto de mira de otro club grande de LaLiga, en este caso el del Real Madrid. Carlo Ancelotti, que le tuvo en Liverpool durante su etapa allí, sería quien habría pedido su fichaje.
'TuttoMercatoWebb' asegura que el interés del entrenador madridista en su ex pupilo es total, pero deja claro que el Everton no tiene pensado dejar marchar al goleador. Los ingleses solo negociarían su salida con una oferta igual o superior a los 90 millones de euros. Por menos de eso, los 'toffees' no dejarán que se marche, por lo que los blancos tendrán que poner toda la carne en el asador si de verdad quieren complacer a su míster.
Si esta información es cierta, prácticamente no hay opciones de que el Madrid fiche a Richarlison este verano. Los merengues en ningún caso gastarán esta cantidad de dinero en un punta que está lejos de ser uno de los mejores del mundo. El gran sueño y la obsesión de Florentino Pérez es Kylian Mbappé y todo el dinero que tienen los de la capital en caja irá destinado a ese fichaje, en caso de que el Paris Saint-Germain de luz verde.
Richarlison está lejos de ser 'top'
Aunque el brasileño es un '9' interesante y está cuajando unos buenos Juegos Olímpicos, donde anotó un 'hat-trick' en su debut con Brasil, no es un jugador en el que gastar 90 'kilos'. Tiene velocidad, potencia, carácter y técnicamente es muy aprovechable, pero no está a la altura de los más grandes. Por ello, aunque a Ancelotti le encante, su presidente no hará el esfuerzo que la operación exige.