El Real Madrid comenzó la pretemporada con Ancelotti y salvo los jugadores en Eurocopa y Copa América, cuenta con los principales futbolistas de la primera plantilla, incluyendo los regresos de cesión. Entre las ausencias, un delantero de peso, que fuera de Karim Benzema no existe en el club.
Jovic parece más fuera que dentro luego de aparecer con sobrepeso en el equipo una vez más, algo que puede solucionar Pintus pero la actitud del delantero no parece ser la adecuada y Ancelotti habría decidido dejarlo fuera de la planificación. Ante la situación, el club ya se mueve para un sustituto.
La salida de Mariano es un hecho, que junto a Jovic son los encargados de competir con Benzema el puesto de atacante y no han podido ni inquietar un poco, de hecho Zidane tuvo que jugar con el francés a medio gas cuando regresaba de alguna lesión. Ancelotti levantó el teléfono y marcó el número de un Brasileño.
Richarlison, que fue su delantero en el Everton con muy buen nivel demostrado y en el Real Madrid lo ven como un sustituto accesible para Benzema, a falta de saber la disposición que tendría el jugador sabiendo que Vinicius es proyecto intocable y Rodrygo va por el mismo camino dentro del club.
Hazard y bale parecen estar en el último compás de su tonada merengue y esto comienza a abrir los puestos en el equipo, que ya perfila un once ofensivo con Odegaard como referente habilitador por detrás de uno o dos atacantes. Kaká alcanzó su máximo nivel de la mano de Ancelotti jugando de esta misma manera.
La posible venta de Richarlison será complicada porque en Everton ya ven próxima la salida de James, lo que dejaría sin referentes al club a menos que el Real Madrid esté dispuesto a desembolsar una buena suma de dinero. Este fichaje, sería el primero del técnico italiano en su segunda etapa.
Haaland es imposible
La llegada de Haaland era el gran objetivo para el ataque del Real Madrid, sabiendo que podía formar una gran dupla de ataque con Benzema. Pero la postura del Dortmund y la crisis causada por la pandemia dificultan que este movimiento se consiga a menos que las ventas de los blancos sean significativas.