Estas últimas dos semanas del mercado de fichajes estarán llenas de rumores sobre el futuro de unos cuantos jugadores del FC Barcelona. A día de hoy y después de que hace unas semanas parecieran descartadas, las ventas de Ansu Fati o Ferran Torres vuelven a estar sobre la mesa de los dirigentes de la entidad azulgrana como operaciones que podrían ayudar al club a generar ingresos extraordinarios que, posteriormente, sirvan para cumplir los últimos objetivos en la ventana de transferencias.
Desde el club se han encargado de dejar la continuidad de ambos en el aire. Cada vez que ha sido cuestionado al respecto, Xavi Hernández ha repetido que de aquí al 31 de agosto cualquier cosa podía pasar y que no está en condiciones de dar por 'sentado' el futuro de ningún jugador, sobre todo porque el Barça tiene grandes problemas con su Fair Play financeiro. Los futbolistas, en cualquier caso, defienden que tienen contrato... y quieren quedarse.
'Overbooking' ofensivo en el Barça
La posición del Barça, de momento, es muy clara. Entienden que hay demasiados atacantes, a pesar de la reciente salida de Ousmane Dembélé y tienen como intención apostar por Lamine Yamal en este curso. El entrenador egarense ya ha dejado caer cuáles son sus preferencias, después de que en el debut en LaLiga apostara por Ez Abde como reemplazo de Raphinha, expulsado. Además, dio ingreso al jugador de 16 años antes que a Ansu Fati y dejó a Ferran Torrres en el banquillo. No disputó ni un minuto.
Los blaugrana siguen manteniendo la opción de Joao Félix viva y para eso, antes, tendría que salir uno de los dos atacantes. 'SPORT' ha informado que ambos han dejado claro que no están por la labor de cambiar de aires durante este verano, algo que vienen reafirmando desde que terminó la pasada temporada. Sin embar y a pesar de que no quieren moverse, el Barça pretende insistir durante esta semana. Sobre todo en el caso de Ansu, por el eque hay equipos interesados como el Atlético de Madrid.
El traspaso de Ansu es más rentable
En el club toman en consideración que el internacional con España fue formado en La Masia y no hay nada pendiente por amortizar. Es decir, todo lo que se genere de una hipotética venta durante este verano ingresará directamente a las arcas del club, mientras que con Ferran todavía hay que amortizar parte de su traspaso, en enero de 2022, cuando se pagó al Manchester City 45 millones de euros (más diez en variables) por su ficha. Además, desde el club le ven como una alternativa para reforzar la posición del '9' hasta que aterrice Vitor Roque en la Ciudad Condal, en enero del año que viene.