No es ningún secreto que el Atlético de Madrid no quiere que Joao Félix continúe en el club colchonero, ni Joao Félix quiere continuar jugando con el Atlético. Sin embargo, la situación en la práctica no es tan sencilla como esas dos afirmaciones, pues ya con la llegada del mes de agosto, el portugués sigue entrenándose a las órdenes de Diego Simeone y eso parece que no va a cambiar, por lo menos, a muy corto plazo.
Y es que pasan los días, pasan los entrenamientos y ambas partes siguen sin ver un destino claro, sobre todo pensando en que llegue una solución antes de que comience LaLiga el próximo 15 de agosto. Cada día que pasa, la situación es peor para el club y mejor para los interesados en él, como por ejemplo sucede con un FC Barcelona que por el momento no se mueve.
Joao tendrá que tomar un riesgo importante este verano
Los culés no quieren afrontar un traspaso tras la irregular temporada del futbolista en Can Barça. De hecho, 'Relevo' afirma que si Joao quiere volver a vestir la camiseta azulgrana deberá forzar un escenario como el del pasado verano, y esperar al conjunto catalán casi hasta el último minuto. El Barça apuesta por otra cesión, aunque deja siempre al luso como una alternativa de último minuto, dependiendo lo que suceda con jugadores como Nico Williams, Raphinha, Ferran Torres o Ansu Fati.
Así, el jugador tendrá que valorar si pasa todo el mes de agosto esperando por el conjunto catalán o, por ejemplo, cede ante el interés del Benfica, el club en el que se formó y desde donde maravilló a propios y extraños con solo 19 años. El equipo luso podría tener en breve la capacidad económica para afrontar la operación en los términos actuales, en los cuales el Atlético pide 60 millones de euros por su fichaje, con los lisboetas intentando comprar el 50% de sus derechos.
En Portugal e Inglaterra tienen clara la estrategia
También ha estado en el entorno del jugador el Aston Villa de Emery y Monchi, que sí tiene la capacidad para mover al futbolista de Madrid, aunque en las últimas horas han decidido centrarse en otras operaciones e intentar jugar con la desesperación del Atleti. Tanto Benfica como Villa sabe que si los colchoneros tienen solo una cesión de Joao como alternativa, acabarán rebajando sus pretensiones y cediendo a una oferta a la baja para, al menos, recuperar algo de su fallida inversión de 120 millones de euros.