Por unos motivos u otros, Pablo Torres finalmente no no ha podido consolidarse, ni como una opción de cambio, esta temporada en el FC Barcelona. El mediocampista llegó en verano como una apuesta a futuro, pero igualmente se esperaba que pudiera empezar a sumar minutos con el primer equipo, y ser un fijo en el filial, pero el curso ha entrado en su recta final y ninguno de los dos escenarios ha llegado a concretarse.
El club blaugrana fichó a Pablo Torre con el compromiso de que el jugador estaría siempre en dinámica de primer equipo a la espera de oportunidades. La idea era intentar una irrupción como la de Gavi o Pedri, pero no ha sido posible dada la competencia que hay en el centro del campo, así como a una relación un poco distante con el cuerpo técnico culé.
La 'oscuridad' absoluta para el futbolista de 20 años
El cántabro sólo ha jugado 239 minutos con el primer equipo y prácticamente tampoco ha ayudado al filial, en Primera RFEF, donde los culés se juegan estar en playoffs por estos días. Teniendo todo esto en cuenta, el Barça tiene claro que el futbolista no puede pasarse otra temporada en blanco y apuesta por su cesión a un equipo de Primera, ya que la probabilidad de otra temporada como la actual, si se completa la planificación para el próximo proyecto deportivo, es muy alta.
A pesar de que Pablo Torre siempre ha sido reacio a salir a préstamo, ahora mismo 'Sport' ha explicado que el club espera convencer al futbolista de que debe replanteárselo seriamente e intentar mostrar que puede ser un futbolista titular en cada fin de semana. De hecho, para los últimos 5 o 6 partidos de la actual Liga se espera que pueda sumar muchos minutos, entendiendo que el título ya estaría más que definido.
Destinos más que atractivos para un mediocampista en formación
La información igualmente señala que existen varios clubes que se han interesado por la cesión de Torre, entre ellos el Villarreal, equipo que ya preguntó en enero por el centrocampista, así como también Osasuna, Celta y Almería. El club catalán priorizará absolutamente la cesión para intentar que el ex Racing sume la mayor cantidad de minutos posible el siguiente curso y regrese en 2024 mucho más maduro, algo parecido a lo que ha sucedido esta temporada con Abde.