Ousmane Dembélé renovó su contrato con el FC Barcelona el pasado verano bajo unas circunstancias muy particulares para ambas partes. El futbolista llegó a un acuerdo por sólo dos temporadas, a pesar de su juventud, después de ya ser futbolista libre por haber finalizado su anterior acuerdo el último día de junio y además firmó sin recibir una prima por renovación, algo que en enero de 2022 precisamente había sido el motivo de la ruptura en las negociaciones.

Por todo este escenario, en el que el Barça logró retener a un jugador que podía haber perdido sin recibir nada a cambio, ahora la posible salida del atacante antes del próximo 31 de julio no es demasiado favorable para los culés. Al negociar en aquellas circunstancias en julio de 2022, la entidad azulgrana incluyó una cláusula de salida de sólo 50 millones de euros, la cual estaría hasta el último día del actual mes de julio.

El Barça podría beneficiarse, pero de forma parcial

Aquella cifra siempre se mostró como baja para el talento del francés, aunque estaba claro que en el peor de los casos el Barça podría recibir una buena cantidad por su traspaso y tener aún un mes disponible para pensar en su recambio. Sin embargo, desde Francia ya L'Équipe había informado que los 50 'kilos' no serían todos para el club catalán y así lo ha confirmado el periodista de 'AS', Andrés Onrubia. 

El especialista en fútbol francés, y encargado de seguir la actualidad del equipo galo, ha detallado que si el jugador paga su cláusula de salida para marcharse al PSG, el Barça únicamente recibiría 25 millones de euros por la operación. La otra mitad del traspaso del delantero se quedaría para el propio futbolista y su entorno, en una fórmula que utilizaron para intentar obtener la prima de renovación que no hubo al firmar el nuevo contrato como culé.

En el Camp Nou están tranquilos respecto a la continuidad de Dembélé

Aunque desde Barcelona insisten en el compromiso de Dembélé en permanecer en el proyecto de Xavi, cumpliendo con su último año de contrato que tiene en vigencia y pensar en una nueva renovación. De hecho, aún no habrían contactos entre el PSG y el jugador, y únicamente se trataría de un interés de los galos en reforzar su línea de ataque ante la inminente salida de Kylian Mbappé.