Entre las muchas incógnitas que rodean al Barça de la próxima temporada, una de las que más preocupa a la afición es la continuidad de los Joaos. No obstante, para el presidente Laporta y Deco, la continuidad de los dos jugadores portugueses está sobre la mesa y el club irá a por todas con ambos. De hecho, en la entrevista que concedió el máximo dirigente azulgrana en RAC1, pudo afirmar rotundamente que "Deco está trabajando para que sigan", un mensaje que deja claro que los lusos entran en los planes del Barça la temporada que viene.
Ambos jugadores llegaron al equipo en calidad de cedidos, siendo una firme apuesta del presidente azulgrana para devolver la ilusión a la plantilla. Además, su representante Jorge Mendes fue una pieza clave para ultimar las cesiones, y lo será para formalizar sus inminentes fichajes. Dos jugadores con rendimientos diferentes y roles muy distintos en la plantilla, un lateral 'comodín' que puede jugar donde se le pida y un extremo irregular, capaz de lo mejor y de lo peor.
Joao Cancelo, el fichaje que más convence
Por su parte, Joao Cancelo llegó al equipo para cubrir la plaza del lateral derecho, pero su rol en el equipo ha ido mucho más allá. Se le ha visto de extremo por la banda derecha y también ha servido de 'parche' en el lateral izquierdo con las lesiones de Marcos Alonso y Balde. Si bien su lesión en la rodilla le ha hecho bajar un poco el rendimiento, es uno de los máximos argumentos ofensivos del Barça esta temporada. Sus internadas por la banda han firmado tres goles y tres asistencias en 24 partidos, y aunque su aporte defensivo no es una de sus virtudes, es uno de los mejores del mundo en su posición. Su contrato con el City expira en 2027, pero su mala relación con Guardiola podría favorecer su fichaje por el equipo azulgrana, que buscará hacerse con el portugués por menos de 25 millones.
Joao Félix, una compra repleta de dudas
La otra cara de la moneda es Joao Félix. Su llegada a la Ciudad Condal fue un capricho de Laporta, puesto que Xavi no estaba del todo convencido. Arrancó muy bien la temporada, pero su irregularidad ha sembrado muchas dudas y le ha costado ser un suplente más. Se trata de un jugador con una calidad de clase mundial, pero sus problemas de actitud y sus luces y sombras en el campo han hecho que el técnico no lo tenga en cuenta. Siete goles y cinco asistencias en 28 partidos y una relevancia descendente en la plantilla con el paso del tiempo son algunas de las marcas del luso como culé. Aun así, la directiva azulgrana está convencida con su fichaje y, aunque las negociaciones con los colchoneros no serán fáciles, su poca afinidad con el club de la capital podría ser uno de los argumentos de su salida.
No obstante, todavía está por ver quién sustituirá a Xavi en los banquillos culés, un dato que será importante para valorar la continuidad de estos dos jugadores, puesto que quien llegue deberá estar de acuerdo. Además, habrá que tener en cuenta el fair play disponible de cara a la temporada que viene y si la 'cartera' dará para formalizar estos dos fichajes. Aún así, todavía queda mucha temporada para seguir valorando el rendimiento de los portugueses y si vale la pena hacerlos de la casa.