El FC Barcelona vive en bucle cada año y, a pesar de que en esta temporada salvo un giro de guión completamente inesperado ganará LaLiga -primera desde 2019-, los azulgrana vuelven a reencontrarse con los fantasmas de siempre cada tanto. 'Casualmente' es en las noches grandes, cuando más se espera respuesta por parte del equipo. Es un ciclo que, de momento, no tiene solución... Incluso después de la revolución histórica, en materia de fichajes, que se firmó en el verano. En esta temporada, han sido tres las caídas abruptas de los culés.

La eliminación de Champions, fase previa de Europa League y Copa del Rey dejan 'tocado' al equipo. No es casualidad que, cuando mayor es la exigencia, más fácil sea que un golpe deje completamente noqueado al equipo. Influye la juventud del equipo, que es un proyecto en plena construcción, las bajas... pero no puede servir como 'excusa' para tapar el hecho de que el Barça no está tan cerca de su mejor versión como parecía. La derrota contra el Real Madrid, después de 44' muy solventes, lo han dejado más que claro. 

Revolución necesaria en el Barça

Si bien la situación del Barça con respecto a su masa salarial y 'fair play' financiero invitan a todo menos al optimismo, en este verano serán más que necesario los esfuerzos y, sobre todo, los refuerzos para el equipo. La inversión del año pasado no ha sido suficiente para que los blaugrana vuelvan a competir en Europa y, tras la goleada del Madrid, toma más fuerza la realidad de que, más allá de la regularidad que han conseguido en LaLiga, los de Xavi todavía no han dado el salto de calidad que tanto se les exige. 

En el staff del entrenador de Terrassa reconocen que el equipo ha crecido muchísimo y que los jóvenes se han convertido en los nuevos líderes, pero también necesitan acompañantes y 'cracks' mundiales al lado, además de Robert Lewandowski. 'SPORT' apunta que el mensaje ha sido bastante claro y han pedido, desde hace tiempo, jugadores que marquen la diferencia en Europa. Son conscientes de que es muy difícil, por el tema del factor económico, pero el club estará obligado a intentarlo hasta el final. 

Dos fichajes de 'cracks' en la agenda

En este sentido, la intención del Barça será apostar por dos 'cracks' mundiales que sean indiscutibles para el equipo y que sirvan de guías. Esos que cambian por sí solos los partidos y que no necesitan de mucho para brillar. Los principales nombres en la agenda son los de Lionel Messi y Bernardo Silva, aunque los dos están en posiciones muy, muy diferentes. El argentino nunca ha estado tan cerca de volver a la Ciudad Condal como ahora, después de su 'divorcio' con un París Saint-Germain con el que termina contrato el próximo 30 de junio. 

Volver al Spotify Camp Nou será su primera opción, en caso de salir, y desde el club están esperando el 'timing' adecuado para comenzar las negociaciones, a la espera también de tener seguridad -o una idea- de si podrán resolver sus problemas con el 'fair play' financiero de cara a la próxima temporada. Es lo primero que deben hacer antes de conseguir un acuerdo con el argentino y, de momento, no están las condiciones dadas. 

Por otro lado está un Bernardo Silva que vive entre rumores sobre una posible salida del Manchester City y que, hasta hace muy poco, había sido completamente descartado por los culés ante la difícil situación económica. La dirección deportiva había decidido apostar por un Gündogan, que en verano será agente libre. Sin embargo, según 'SPORT', lo volverán a intentar porque son conscientes de que sería un jugador diferencial. Al menos uno de los dos podría llegar al cuadro azulgrana. 

Plan de 'viabilidad' de futuro 

En el Spotify Camp Nou son más que conscientes de que los problemas con el 'fair play' financiero no se solucionarán de la noche a la mañana y que necesitarán demasiadas fórmulas para que todo encaje. Es por ello que Mateu Alemany, director del área de fútbol, está trabajando en un plan de viabilidad de futuro para presentarlo a LaLiga. Lleva algún tiempo negociando con la patronal acciones relacionadas sobre la mejora de ingreso, reducción de sueldos y venta de futbolistas en el verano. 

La intención de los blaugrana sería asegurar que la masa salarial se rebajará drásticamente (LaLiga pide unos 200 millones de euros menos) pero sería muy difícil que se consiga en un solo verano. La fuente antes citada explica que sí podrían hacerlo en dos cursos y que, si se aprueba el plan, el Barça sí podría salir al mercado de fichajes estival en búsqueda de fichajes que aporten más calidad a la plantilla.