Queda poco más de una semana para que la ventana invernal de traspasos quede cerrada y no permita cerrar más incorporaciones. Antes de que eso suceda, en el FC Barcelona multiplicarán esfuerzos para cerrar la incorporación de un delantero centro que permita cubrir el hueco dejado por Luis Suárez, que estará recuperándose de la operación de su menisco, al menos, hasta el mes de abril.
Dadas las circunstancias, Quique Setién abrió las puertas a la llegada de un refuerzo ofensivo y la dirección deportiva ya se mueve para encontrar esa pieza. Naturalmente, lo hace con varias alternativas encima de la mesa y, aunque ninguna de ellas va a ser sencilla de cerrar, la secretaría técnica jugará todas las cartas encima del tapete para contentar las necesidades de una plantilla que está sin su segundo máximo goleador.
En esta misma dirección y según las informaciones publicadas por Mundo Deportivo, Eric Abidal, Ramon Planes y Òscar Grau se reunieron el pasado martes con Jorge Mendes, el super agente del imperio Gestifute que lleva gran cantidad de futbolistas, posiblemente en vistas a abrir alguna posibilidad de mercado que permita al FC Barcelona hacer frente a reforzar su delantera.
Las informaciones apuntan a que la excelente relación de Mendes con Peter Lim, propietario del Valencia, podría ayudar a convencerle de acceder a la venta de Rodrigo, que se cifraría en una cifra que rondaría los 50 o 60 millones de euros. Naturalmente, se trata de una cifra inalcanzable a tocateja para el Barça en estos momentos, pero sí podrían haber un par de fórmulas alternativas para cerrar su llegada.
La primera manera sería la que ya detallamos en 'FCBN' durante el miércoles: una cesión hasta final de temporada con una opción de compra compensatoria, en la que el Barça pagaría un traspaso más alto en verano para compensar estos seis meses de cesión en los que el Valencia perdería a su estrella en beneficio del equipo de Quique Setién.
La 'carambola' de Rodrigo
El medio de comunicación anteriormente citado también especula con una segunda opción correspondiente a una 'carambola' utilizando la influencia de Mendes: el portugués es representante de Nélson Semedo, jugador que el Barça considera transferible y por el que se podrían sacar unos 45 millones de euros (las ofertas del pasado verano rondaban esa cifra) por lo que, si se cerrase su venta, se tendría dinero suficiente como para atacar el fichaje de Rodrigo satisfaciendo las expectativas económicas del Valencia.