Azpilicueta sigue sin renovar y el Barça estrecha el cerco con él

Desde los despachos del Camp Nou se siguen moviendo para fortalecer la plantilla del FC Barcelona. Muchos nombres siguen sonando alrededor del cuadro dirigido por Xavi, y varios de ellos se acercan cada vez más a la Ciudad Condal. Andreas Christensen está cerrado, Franck Kessié y Noussair Mazraoui están a punto, y el último en sumarse ha sido César Azpilicueta.

Es conocido el interés del conjunto azulgrana por el defensa polivalente del Chelsea. Desde el club consideran que sería un jugador que aportaría experiencia, liderazgo y muchas ventajas en cuanto al juego se refiere para potenciar la retaguardia culé. Por esta razón, el club ha decidido ir con todo por el lateral navarro, cuyo convenio con el equipo de Londres culmina el 30 de junio de este año.

Precisamente, este es el motivo que más acerca al ex de Osasuna a las filas catalanas. La renovación del jugador está sujeta a una cláusula unilateral que, hasta los momentos, el Chelsea no ha activado. Dicha cláusula estipula que si el futbolista alcanza un determinado número de partidos, este puede ampliar su contrato únicamente si ambas partes, club y jugador, están de acuerdo. Desde Can Barça ven esta situación como una oportunidad de mercado prácticamente irrechazable e insistirán en la contratación del internacional con España. 

El capitán del conjunto de Stamford Bridge no vería con malos ojos unirse al equipo azulgrana. Xavi Hernández se ha encargado de hablar con el jugador, con quién coincidió brevemente en la Selección, para exponerle su proyecto y los planes que tiene con él. El de Terrassa valora mucho al navarro, considera que la veteranía y profesionalismo de 'Azpi' servirían de ejemplo para los más jóvenes del equipo. Además, sería un refuerzo de primer nivel para la zaga central y el lateral diestro, en caso de que salgan Dani Alves o Sergiño Dest.

La situación del Chelsea, a favor del Barça

El conjunto 'blue' vive un momento sumamente delicado debido al bloqueo de activos que impuso el Gobierno Británico sobre Roman Abramovich, dueño del Chelsea. Este decreto prohibe al equipo londinense incorporar jugadores o hacer nuevos contratos, por lo que las renovaciones tanto de Azpilicueta, como las Christensen o Rüdiger están paradas. En el caso del danés, es casi un hecho que pondrá rumbo a Barcelona, pero el futuro del germano es incierto. El Barça espera 'pescar en río revuelto'.