De acuerdo a una reciente información publicada por el diario alemán Bild, ahora mismo los grandes clubes de Europa estarían muy pendientes de lo que ocurre en el Borussia Dortmund, donde la situación deportiva les ha sacado de carrera por el título de Bundesliga y la lucha se ha reducido a acceder a la próxima UEFA Champions League, un salvavidas que evitaría un hundimiento mayor: vender para mantener la estabilidad financiera.

Y es que, como se ha señalado antes, las arcas de los equipos del viejo continente sigue sufriendo debido la crisis generada por la pandemia del COVID-19, de la cual no escapa el conjunto germano, según las propias palabras citada por el mencionado medio de comunicación de Hans-Joachim Watzke, CEO del club, quien tiene claro que el Dortmund actual no resiste más una deuda tan gigantesca. Además, señaló, que para evitar caer en una crisis peor, la venta de estrellas es un tema no solamente ya meditado, sino fundamentalmente decidido. 

El tabloide germano precisa que en la operación para bajar la masa salarial se incluirían a los jugadores Sancho, Gio Reyna y Raphael Guerreiro, siempre que llegue la oferta adecuada por ellos. Sin embargo, aunque no se mete a Erling Haaland, de no llegar lo que se pide por los anteriores tres, el delantero noruego estaría entre las luminarias que saldrían. Una situación que pelaría los ojos de todos los grandes de Europa, entre ellos, el FC Barcelona, que pese a las urgencias económicas que atraviesa no ha escapado de los rumores que le vinculan con el crack goleador. 

Recordemos que la bomba la soltó el pasado 15 de enero el periodista Oriol Domènech en el programa 'Onze' de TV3, quien aseveró que Mino Raiola, representante de Haaland y otros jugadores, habría manifestado que tendría la intención de llevar al noruego al Barça. Y además, recordó, las buenas relaciones del agente italiano con el club culé.

Haaland, más que complicado

Aunque el nombre de Haaland se encuentra en la órbita culé, todo pareciera que será una novela con un final feliz imposible para el club catalán. Una abultada masa salarial, con Leo Messi a la cabeza, y una enorme deuda le restan capacidad de maniobra a una entidad que todavía espera por las elecciones, para así definir a su nuevo presidente tras la marcha de Josep Maria Bartomeu. 

Por ejemplo, en la memoria económica de la pasada temporada que el Barcelona hizo pública recientemente, se reveló que el equipo culé debía hasta el pasado 30 de junio un total 322 millones de euros -solo a otros clubes- por los plazos pendientes de los fichajes y traspasos acordados en fechas recientes. Pero la deuda total es de unos 1.173 millones de euros al sumar el adeudo a corto y largo plazo.

De esto último es muy consciente Toni Freixa, candidato a las elecciones a la presidencia del FC Barcelona que se celebrarán el próximo mes de marzo, quien consideró más que imprudente realizar promesas sobre fichajes que a simple vista no están a la mano por los momentos, tras insistir que la solución al declive del club "es una buena gestión deportiva". 

“Cuando salga un candidato prometiendo a Haaland, hay que preguntarle si lo pagará de su bolsillo. Ahora mismo, el FC Barcelona no está en condiciones de hacerlo; dentro de cuatro días, sí, cuando se reabra el estadio y se vuelvan a generar ingresos”, enfatizó Freixa, en alusión a aquella información que circula y en la cual se asegura que Raiola y Joan Laporta podrían acordar sobre Haaland, siempre y cuando el ex presidente sea reelegido para el cargo.