¡Deco no es el único! El Barça suma a Vítor Baía como posible relevo de Alemany

El FC Barcelona sigue en la búsqueda de un nuevo director de fútbol después de que Mateu Alemany confirmara su salida a partir del próximo 30 de junio. Entre los nombres que han evaluado en los despachos está el de Deco de Souza, representante de Raphinha y uno de los ojeadores que ha tenido el club por Sudamérica.

A pesar de que gusta mucho a la Junta Directiva y varios conocedores han afirmado que está capacitado para ocupar el cargo, lo cierto es que la búsqueda continúa abierta y ya existe un nuevo candidato sobre la mesa. Así lo ha desvelado el diario 'SPORT', quien sostiene que sería Vítor Baía quien está llamando la atención de los ejecutivos azulgrana.

Vítor Baía cumplió con el Fair Play

Más allá de su paso por el club entre 1996 y 1999, lo que ha cautivado a Joan Laporta y compañía es la increíble gestión que ha llevado a cabo en las oficinas del Oporto en los últimos años. Actualmente es el vicepresidente deportivo de la institución y ha podido sacar adelante al equipo con buenos resultados y también saneándolo económicamente.

Es importante recordar que los portugueses vivían bajo el yugo del Fair Play financiero de la UEFA y no podían invertir grandes sumas para mejorar la plantilla. Sin embargo, el potencial del plantel siguió batallando por los primeros puestos de la liga y, de hecho, consiguieron hacerse con dos de los últimos tres campeonatos locales. El prestigio de Baía en Portugal es innegable y también en Barcelona, donde ha participado de forma regular en los partidos de los Legends.

Perfil diferente al de Deco

Así las cosas, su perfil es totalmente diferente al de Deco, quien está más orientado al mercado de fichajes y al mundo de los agentes y jugadores. Por su parte, el exguardameta luso conglomera todos los estatutos de cómo dirigir una entidad y gestionar sus finanzas para un beneficio rentable, algo que precisamente necesita el Barça en estos momentos. Habrá que ver qué ocurre en las próximas semanas, unas que estarán marcadas por la presión de las ajustadas normativas económicas de LaLiga.