Desde los despachos del FC Barcelona no dejan de trabajar en posibles mejoras para la plantilla con miras al futuro. Después de un mercado de verano de 2024 bastante discreto debido a los problemas con el 'fair play' financiero, los cuales permitireron incorporar 'únicamente' a Dani Olmo y Pau Víctor, la directiva culé espera sanear definitivamente sus cuentas en los próximos meses para poder acometer fichajes de alto calibre de cara a la temporada 2025-2026. De alcanzar esta meta, los catalanes tendrían claros sus dos primeros objetivos para la ventana estival del próximo año.
Y es que Deco tiene en mente revolucionar el mercado y todo parece indicar que sus principales esfuerzos estarán enfocados en la defensa y el centro del campo. Ambas áreas siguen estando debilitadas por las 'lesiones' y la falta de algún futbolista de renombre, situación a la que se le sumaría el posible adiós de algunos jugadores en 2025. Iñigo Martínez, por ejemplo, finaliza contrato el siguiente verano, y los convenios de efectivos como Frenkie de Jong, Eric García, Ronald Araújo y Andreas Christensen expiran en 2026 y, a día de hoy, no hay avances significativos en sus renovaciones, por lo que los blaugranas empiezan a 'cubrirse las espaldas'.
El sueño de Kimmich se mantiene vivo
Es de público conocimiento que el conjunto catalán pretende a dos 'cracks' de la selección alemana. El primero de ellos, Joshua Kimmich, que ha sido uno de los grandes favoritos de la dirección deportiva desde hace varios años y cuyo nombre resonó en los pasillos del Spotify Camp Nou este verano, puesto que su relación con el Bayern Múnich entró en un 'terreno pantanoso'. Sin embargo, ambas partes reconducieron la situación y el ahora capitán de 'Die Mannschaft' decidió quedarse, al menos, otra temporada en Baviera, pero todo podría cambiar en los próximos 12 meses.
Desde la directiva muniquense están confían en que podrán convencerle de renovar su contrato, el cual finaliza en junio de 2025, pero todo dependerá de la palabra final de Kimmich, que a sus 29 años se estaría planteando seriamente el probar un nuevo reto en un horizonte diferente. Su operación no sería sencilla debido a sus altas exigencias, a las que hay que sumarle el interés de otros clubes con mayor músculo financiero como el Paris Saint-Germain, pero el Barça cuenta con la 'baza' de Flick. El mediocampista conoce muy bien al entrenador azulgrana ya que estuvo a sus órdenes en el Bayern y en el combinado teutón, y la buena relación entre ambos podría ser un factor determinante a la hora de decantar la balanza a favor de los catalanes.
Jonathan Tah, nueva alternativa a coste cero
Por su parte, la opción de Jonathan Tah para el centro de la zaga estaría a 'tiro' de los culés. "No renovaré mi contrato por razones profesionales", admitió el propio jugador en declaraciones al diario 'Süddeutsche Zeitung', motivo por el cual su contratación sería más que asumible para la entidad azulgrana si solucionan definitivamente sus contratiempos financieros ya que sólo deberían pagar el salario del defensor y la prima de fichaje.
En ese sentido, el conjunto barcelonista quiere asegurarse sus servicios como agente libre y ya han dado a conocer este interés a su representante. Sin embargo, la 'puja' por el futbolista será difícil, con el Bayern Múnich como el principal competidor del club en la carrera, puesto que Tah también estuvo en su agenda el pasado verano e intentarían nuevamente su incorporación en 2025. A favor de los catalanes juega el 'factor Pini Zahavi', agente del central y que mantiene una gran relación con la directiva blaugrana, especialmente con Deco y Joan Laporta. Así las cosas, el mercado veraniego azulgrana del próximo año comienza a tomar forma.