El Chelsea se niega en rotundo a desprenderse de su máxima estrella, Eden Hazard, y hará todo lo posible para retenerla en la plantilla de cara a la próxima temporada 2018-19. Pese a que fue vinculado con el FC Barcelona, el astro belga sería hoy por hoy el gran objetivo del Real Madrid para reforzar el frente de ataque de cara al próximo curso.
El Chelsea, tras el gran Mundial 2018 de Hazard y teniendo en cuenta que es una estrella consagrada joven y de gran talento, no le dejará escapar a no ser que el Real Madrid pague un mínimo de 200 millones de euros, tal y como asegura 'The Sun'.
El Real Madrid no estaría dispuesto a pagar semejante cantidad de dinero por el futbolista belga, y tan sólo ofrecería 130 'kilos', dinero insuficiente para sacarle del Chelsea dado lo que se ha inflacionado en los últimos meses el mercado de fichajes.
En este punto, lo único que puede favorecer al conjunto presidido por Florentino Pérez es que Hazard ejerza algún tipo de presión sobre la directiva del Chelsea, liderada por Roman Abramovich, para que le dejen marcharse al Real Madrid por un precio inferior a los 200 'kilos' que pedirían desde Stamford Bridge, al menos según la información citada.
El Real Madrid tira de jóvenes promesas... De momento
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, ya aseguró durante la presentación de Andriy Lunin como nuevo portero blanco que, "después de los últimos grandes títulos conquistados en estos últimos años, va a continuar siendo leal a una forma de entender este deporte que le ha conducido a una fórmula de éxito y que ha permitido también mantener una estabilidad financiera y una fortaleza económica importantísimas".
El Real Madrid, en cualquier caso, no sólo podrá basarse en la llegada de las jóvenes promesas que está fichando, sino que tras la marcha de Cristiano Ronaldo a la Juventus de Turín necesitará un nuevo 'crack' de referencia para que el equipo sea más fuerte anímica y psicológicamente. Eso, sin contar que el Real Madrid necesitará contrarrestar la pérdida de pólvora ofensiva tras la marcha del luso. Todo un reto, sin duda.