La Champions fue el primer escenario de la batalla entre FC Barcelona y PSG, que ha salido del ámbito deportivo para convertirse en una guerra institucional. Las acaloradas discusiones en los despachos han tenido como protagonistas a Thiago Silva, Marquinhos, Marco Verratti, Ángel Di María, Neymar o Frenkie de Jong, y tras varias victorias incontestables, los franceses podrían apuntarse otro triunfo.

Aunque los catalanes tenían encarrilado el retorno de Takefusa Kubo, en los últimos días ha habido malas noticias al respecto, ya que la perla que emigró de la Masia tras la sanción de la FIFA parece que finalmente no regresará a la Ciudad Condal. Un cambio de representantes y unas nuevas y desorbitadas exigencias habrían dado al traste con la operación, que ahora beneficiará a otro grande.

Varios medios informaban recientemente de que la llegada del nipón, que debía confirmarse a partir del 4 de junio, fecha de su 18 cumpleaños, estaba prácticamente descartada, ya que el preacuerdo que se alcanzó con la ayuda de Arturo Canales se rompió con la entrada en escena de Roberto Tsukuda y Manel Ferrer, los nuevos asesores del atacante que optaron por un drástico cambio de planes.

Los nuevos agentes del japonés reclamaron un sueldo de estrella y un contrato que asegurara su salto al primer equipo, dos condiciones que no aceptaron los azulgrana para no romper la escala salarial y para no recuperar una apuesta que se firmaba años atrás, y que acabó provocando varios problemas en la planificación. Los ascensos son ahora consensuados, con el visto bueno de los responsables deportivos y, sobre todo, de los técnicos.

Estas peticiones negadas por el Barça sí las aceptaría el PSG, al que varios medios del país asiático señalan como principal destino del todavía futbolista del Tokyo FC. La mesura que pretendían los culés con un proyecto de crack que debía acabar de desarrollarse en el filial estalló con oferta de los parisinos, que le ofrecerían un millón de euros por temporada y una plaza de privilegio que le permitiría trabajar con los 'mayores'.

La implicación de Frenkie de Jong, el mejor ejemplo para el Barça

Mientras acepta su derrota con Take y espera la decisión de Matthijs de Ligt, el Barça debe colocar como ejemplo a Frenkie de Jong, que luchó por un contrato que considera justo pero priorizó el amor a unos colores. La implicación del neerlandés, que estuvo cerca del PSG y el Tottenham, debe servir para el futuro, ya que es más importante el compromiso de los cracks que una sonada propuesta económica, algo que hoy en día ofrecen la mayoría de equipos.