El FC Barcelona está decidido a potenciar su proyecto, y pasará un examen clave en el verano de 2020. Aunque la crisis del coronavirus será otro imponente obstáculo añadido, los catalanes pretenden realizar una profunda reforma de la plantilla, para prepararla a corto y largo plazo y asegurarse de que seguirá compitiendo por los títulos. Una de las parcelas prioritarias en esta operación será la delantera.
Josep Maria Bartomeu quiere reconstruir al equipo antes de las elecciones que pondrán fin a su mandato, y está muy atento al mercado. Los responsables deportivos manejan expedientes tan complicados como los de Philippe Coutinho, Arturo Vidal o Ivan Rakitic, por los que desean sacar un buen puñado de millones, y además deberán enfrentarse a las exigencias de otros grandes si esperan conquistar a sus estrellas.
En el Camp Nou se intenta reunir de nuevo a Leo Messi, Luis Suárez y Neymar, y añadir a la mezcla a Lautaro Martínez. Con la experiencia de un tridente que fue durante años el mejor del planeta, los azulgrana piensan blindar por completo el frente de ataque, que quedaría cubierto para varias temporadas y además aseguraría un relevo que podría acercar otra década prodigiosa. Para ello habrá que conversar con los clubes que poseen los derechos del brasileño y el argentino, que aunque no han cerrado puertas, no van a dar a sus cracks por perdidos.
Así están las negociaciones por Neymar y Lautaro
El caso Neymar
Neymar está más cerca del Barça que en los últimos años, pero las conversaciones con el PSG aún no han empezado. Los contactos de los culés hace algunas semanas a través de un intermediario toparon con una respuesta fría, no negativa, pero centrada ahora en otras cuestiones, como superar el parón de las competiciones, amarrar títulos y evitar la fuga de Kylian Mbappé. Según el diario 'Sport', varias fuentes cercanas a la negociación han certificado que el interés es real, pero el tira y afloja podría tardar unos meses y es complicado. Las relaciones entre todas las partes no son las mejores, y los 'bleus' tendrán que demostrar que su predisposición va más allá de un juego. Si quieren sólo dinero, hay poco que hacer, pero si aceptan alguna estrella a cambio, podría haber un pacto bien entrada la ventana estival.
En cualquier caso, la ayuda del crack podría ser una baza importante, ya que sigue cedido a regresar a Barcelona. El de Sao Paulo sabe que tiene poder suficiente como para tomar decisiones y su padre lo recalcó hace escasos días, pero también es consciente de que deberá ejercerlo con cuidado y sin comprometer su futuro. La afición no le va a perdonar más y Nasser Al-Khelaïfi es un hueso duro de roer. El ex del Santos también debería firmar la paz con Bartomeu y compañía, que esperan novedades sobre las disputas judiciales que aún están abiertas.
El caso Lautaro
Hablando de negociación pura y dura, el caso Lautaro estaría ya más adelantado, porque entre otras cuestiones, también se ha hablado, sin reuniones oficiales, de jugadores como Arturo Vidal. Los lombardos han aclarado que no se van a asumir el papel de víctimas y si tienen que renunciar a la cláusula de rescisión de 111 millones de euros, pretenden obtener un trato justo. Si no, no tienen presión, porque eso significaría disfrutar el ariete de Bahía Blanca al menos un año más. En cualquier caso, podrían aceptar un trueque y ya han buscado recambios para el punta, teniendo en cuenta que Antonio Conte seleccionará a las estrellas azulgrana que más le convengan y quiere dos sustitutos si el 'toro' se va.
En términos individuales, el joven tiene claro que su único destino sería el Camp Nou, pero apuesta por un acuerdo sin tensiones. Por un lado, ha jurado fidelidad a los 'nerazzurri' porque le dieron la oportunidad de triunfar en Europa, pero por otro, es consciente de que trenes como el del Barça sólo pasan una vez en la vida. En LaLiga disfrutaría junto a dos de sus referentes, Messi y Suárez, y además podría aspirar regularmente a los títulos en un equipo que le ha prometido que será importante y que está entre los mejores del mundo.