El futuro de Mika Faye es uno de los frentes abiertos del FC Barcelona este verano. El central de 20 años recién cumplidos se ha puesto bajo las órdenes de Hansi Flick en los primeros entrenamientos de la pretemporada blaugrana, trabajando a la par de sus compañeros y logrando cambiar su situación en el club después de que su posible fichaje por el Oporto terminara fallando.

Según el diario 'SPORT', el jugador ha sorprendido para bien al entrenador alemán, que valora sus cualidades y considera que podría encajar en su esquema. Por esa razón, existe la posibilidad de que la hipotética venta del defensor quede 'congelada', como mínimo, hasta enero. El buen rendimiento mostrado hasta ahora por el futbolista, sumado a la lesión de Ronald Araújo, que estará varios meses en el dique seco, hacen que en Can Barça vean con buenos ojos su estadía.

La escuadra azulgrana tiene un problema en el centro de la zaga de cara al inicio de la temporada, ya que además de la baja de Araújo, Pau Cubarsí y Eric García tendrán poco margen de descanso después de disputar los Juegos Olímpicos con la selección española. Mientras tanto, Iñigo Martínez está pendiente de su inscripción, por lo que contar con Faye en el primer equipo comienza a parecer una necesidad en el Spotify Camp Nou.

Su marcha sigue siendo posible

Sin embargo, su futuro no está completamente definido. El senegalés era una de las opciones de la entidad catalana para hacer caja y lo seguirá siendo. La gira por Estados Unidos podría servir de 'vitrina' para el futbolista, ya que si logra destacarse, ningún escenario estaría descartado. No obstante, a priori, lo más probable es que continue hasta enero, y será en ese momento en el que se vuelva a discutir su destino. Si disfruta de la continuidad que desea en los primeros 4 meses de competición, Mika seguiría vistiendo la camiseta blaugrana, pero de no contar con minutos ni regularidad, la solución sería un traspaso.