Ousmane Dembélé ha llegado motivadísimo a la pretemporada 2019 con el FC Barcelona, después de haber acumulado una semana extra de entrenamiento que le ha ayudado a recuperarse al cien por cien de la lesión que arrastraba. El joven atacante francés está fuerte y renovado, con muchas ganas de convertirse en un jugador importante la próxima temporada 2019-20.
No le ha molestado la llegada de Antoine Griezmann, ni mucho menos. Es un gran amigo suyo de la Selección Francesa, y competir con él por la titularidad tan sólo le hará mejorar como futbolista. El presidente del club, Josep Maria Bartomeu, ya dejó claro en reiteradas ocasiones que el Barça cuenta con Ousmane Dembélé para la próxima campaña, y también para las venideras.
Se trata de uno de los mayores activos del equipo, y se tienen depositadas muchas esperanzas en él de cara al futuro. A estas alturas, por tanto, el único movimiento que le llevaría a dejar el FC Barcelona y cambiar de aires sería el fichaje de Neymar Jr, algo que cada vez parece más complicado que vaya a producirse dadas las exigencias económicas del Paris Saint-Germain.
El conjunto galo habría rechazado las tentativas de trueque del Barça a cambio de algunos jugadores -según informó la prensa internacional-, y a día de hoy Neymar está más cerca de fichar por algún otro gran club europeo que por el FC Barcelona. Es una buena noticia para Ousmane Dembélé, que tendrá el sitio asegurado en la delantera culé si el brasileño no vuelve.
Coutinho y Malcom, salidas posibles
Coutinho y Malcom son los únicos jugadores de ataque del Barça que, antes de que termine el verano, pueden hacer las maletas. Malcom ya habría recibido ofertas de Inglaterra y su agente le está buscando acomodo, aunque el Barcelona sólo aceptará un traspaso si es por los 40 millones de euros que pagó por él. De lo contrario, podría potenciar una cesión.
En cuanto a Coutinho, por ahora parece que se queda a tenor de las últimas declaraciones de Josep Maria Bartomeu. Podría ser el quinto atacante de la plantilla, pero en el caso de que llegue por él una oferta que llegue al mínimo de 100 millones de euros, el FC Barcelona estudiará su venta. No completó una buena campaña 2018-19, aunque no se duda de su tremenda calidad. Es posible que, si logra relajarse y olvidarse de toda la presión, vuelva a lucir este próximo curso el juego prodigioso con el que engatusó a los culés durante sus primeros meses en el equipo.