Ilkay Gündogan es la última 'víctima' de la 'operación salida' del FC Barcelona. El mediocampista abandonará la entidad azulgrana apenas una temporada después de haber aterrizado en la Ciudad Condal y volverá al Manchester City, club del que salió como agente libre y al que regresará bajo la misma fórmula. Sin embargo, y aunque no dejará dinero en las arcas catalanas por un traspaso, el jugador ha tenido un gesto importante con el club que 'engrandece' su figura.
Y es que al haber jugado más del 60% de los partidos el pasado curso, su vínculo con la institución blaugrana se extendió automáticamente por una campaña adicional aparte de las dos que tenía cuando firmó, por lo que aún le restaban dos años de contrato con el equipo culé. No obstante, 'Gündo' ha decidido perdonar estos dos años de convenio y de salario a la escuadra barcelonista, ayudando así a la situación financiera de la entidad, tal y como informan en 'AS'.
Este detalle no ha pasado desapercibido y deja claro que el alemán abandona el vestuario azulgrana por la 'puerta grande', ya que además de la cortesía anteriormente mencionada, fue el propio futbolista el que decidió dar un paso al costado cuando no tenía que hacerlo al entender los problemas económicos del Barça. Una muestra de barcelonismo puro que desliga su salida de algún problema con Hansi Flick, que contaba con su compatriota para la próxima temporada.
El Barça, satisfecho con la operación
Por su parte, en los despachos de la Ciudad Condal están satisfechos con la operación pese a no ingresar cantidad alguna de traspaso, puesto que la salida del futbolista significa que se ahorrarán una de las fichas más elevadas de la plantilla y ganan margen salarial para poder inscribir a Dani Olmo. Así las cosas, aunque dolorosa desde lo deportivo, la marcha de Gündogan puede terminar siendo positiva desde lo económico, y el germano se ha encargado de poner todas las facilidades posibles al club para que su adiós se produzca en los mejores términos.