El martes 6 de agosto quedará en el recuerdo como el día en el que un 'hijo' de la Masía volvió a casa. Después de varias semanas de incertidumbre e idas y vueltas, el FC Barcelona finalmente llegó a un acuerdo con el RB Leipzig para concretar el regreso de Dani Olmo a la entidad que le vio crecer. Los catalanes consiguieron satisfacer las pretensiones económicas de los germanos, y tras pactar un pago de 55 millones de euros fijos más 7 en variables por el traspaso del jugador, el egarense vestirá la camiseta azulgrana a partir de la próxima temporada.

Una vez finalizadas las reuniones entre todas las partes involucradas, desde los despachos de Can Barça comenzaron los movimientos para terminar de hacer oficial la incorporación del centrocampista a las filas de Hansi Flick. El club blaugrana agendó un vuelo privado para que el futbolista, junto al director deportivo de la entidad, Deco, haya podido aterrizar en la Ciudad Condal este mismo martes por la noche.

Tras su llegada a Barcelona, el jugador se someterá a las respectivas pruebas médicas entre el miércoles 7 de agosto y el jueves 8 antes de ser anunciado oficialmente como nuevo jugador del Barça. Después de haber cumplido estos pasos, la institución catalana comunicará la fecha de su presentación, la cual podría llevarse a cabo antes del lunes 12 de agosto, día en el que se disputará el Trofeo Joan Gamper ante el AS Mónaco.

Olmo, completamente emocionado por su fichaje

Por su parte, el jugador no puede esperar más por volver a vestir la elástica blaugrana. El internacional con la selección española estaba como loco por regresar al club, y después de haber concretado su fichaje, estaría completamente desbordado por la emoción. El mediocampista firmpo un contrato por seis temporadas, hasta 2030, y se apunta como una de las grandes figuras de este nuevo proyecto que está por comenzar en la Ciudad Condal y que ha despertado la ilusión en todo el barcelonismo.