Arturo Vidal lleva en el radar del Inter de Milán desde hace varios meses. En cuanto Antonio Conte se hizo cargo del equipo 'neroazzurro', el chileno comenzó a sonar como posible refuerzo. El italiano ya tuvo al de San Joaquín a sus órdenes en su etapa en la Juventus de Turín y le quiere para este ambicioso proyecto en el Inter.
El entrenador de Lecce tiene muy claro que necesita al mediocampista del FC Barcelona para poder dar un salto de calidad y, según 'La Gazzetta dello Sport' está insistiendo mucho en su contratación. Para Conte, la llegada del ex del Bayern de Múnich en el mercado de invierno sería prioritaria para poder competirle la Serie A a la todopoderosa Juve.
Parece que el Inter y el Barcelona hablaron la pasada semana y en la conversación salió el nombre de Vidal. El problema para los de Milán es que el FC Barcelona se cierra en banda a traspasar al llegador chileno. Ernesto Valverde le tiene en muy alta estima y le considera una pieza muy importante para su plantilla.
El Barça quiso convencer entonces a los interistas de que aceptaran a Ivan Rakitic en su lugar. El croata también lleva meses en el radar de los italianos y podría haber sido una buena opción, pero parece que ahora mismo no es una prioridad para ellos. El citado diario deportivo de Italia asegura que Conte prefiere un corte de futbolista diferente al del ex del Sevilla.
Conte quiere a Matic si no puede fichar a Vidal
El ex técnico del Chelsea, de hecho, tiene una alternativa en mente por si fuera imposible fichar al sudamericano. Ese mediocentro sería Nemanja Matic, que apenas está contando esta temporada para Solskjaer en el Manchester United. El serbio solo ha disputado cinco partidos en lo que va de curso y parece prescindible para el técnico noruego.
El Inter, a no ser que cambie mucho la situación del balcánico, podría llegar a un acuerdo con los 'red devils' con mayor facilidad que con el Barcelona por Vidal. El ex del Benfica o Chelsea es un centrocampista más posicional que el chileno, pero tiene una enorme presencia física, es un buen distribuidor y con Conte podría recuperar su mejor versión. Además, el entrenador ya le tuvo un año en Londres y sabe que puede sacar lo mejor de él.