El fichaje de Raphinha por el FC Barcelona es una realidad. El atacante se unirá a la disciplina culé por las próximas cinco temporadas, hasta el verano de 2027, después de que el club desembolsara 58 millones de euros fijos que podrían aumentar hasta los 67 'kilos' si se cumplen todas las variables. Aterrizará en el Spotify Camp Nou después de asegurar la permanencia del Leeds United en la Premier, siendo el eje fundamental de la ofensiva de Jesse Marsch.

Su rol en Inglaterra ha sido siempre por la banda derecha, jugando a pierna cambiada y aprovechando su potencial de desborde en el uno contra uno. El esquema 4-2-3-1 es el que manejaban los de Yorkshire en la mayoría de encuentros, recurriendo a sus avanzadas por el costado y en su calidad de regate para causar impacto en los defensores rivales, algo que conoce Xavi Hernández de primera mano con Ousmane Dembélé.

Raphinha logró ver puerta en once oportunidades y repartir tres asistencias durante 36 compromisos en su última campaña con el Leeds, consiguiendo ser el 'Pichichi' y el máximo referente ofensivo del equipo. Sin embargo, su paso ha ido de menos a más desde que salió de la Sub-20 del Avaí brasileño, pasando por el Vitoria Guimaraes de Portugal y después por el Sporting de Lisboa en 2019, club que le abrió la puerta a la élite europea.

La Ligue 1 se interesó en su traspaso y el Rennes desembolsó 21 millones de euros en su fichaje, aunque tan solo un año después sería el Leeds quien obtendría su pase para terminar de exponer su calidad en la liga más importante del 'viejo continente'. Ahora, dos años después de su incorporación, el '10' llegará a Barcelona como uno de los fichajes más importante de este 2022 y con la oportunidad de dejar su huella en uno de los recintos deportivos más laureados a nivel mundial.

Regate, velocidad y estilo

Su regate es característico del jugador 'canarinho' pero su zancada al correr es una de sus virtudes a nivel individual. Con 1.76 metros de estatura, puede eludir a los rivales en el pique en corto y generar una gran cantidad de faltas debido a su estilo de juego. Sumado a ello, su visión del campo es otra de sus virtudes, lo que permite crear oportunidades aún sin tener el balón en su poder.

Pese a que la filosofía de juego del Barcelona recae en la posesión, Xavi le ha dado un giro a los pequeños matices y ha mantenido a los extremos como amenazas constantes en su sistema táctico. Los centros al área y las llegadas por los costados son algo que el egarense desea explotar, por lo que Raphinha es un jugador que encaja a la perfección en esta 'nueva' ideología que se quiere implementar en la dinámica del club.