El FC Barcelona deshoja la margarita con la posibilidad de fichar a algún jugador en el mercado de fichajes invernal. Son muchos los factores que implican un moviento de los azulgrana, pero son dos los que están por encima del todo. Primero, en este comienzo de temporada ha quedado demostrado que la plantilla está muy debilitada, por las salidas de Leo Messi y Antoine Griezmann, y que así es difícil competir por los títulos. Segundo, desde el Camp Nou toman en cuenta de que la situación económica es delicada y que, excediendo el límite salarial, es muy difícil llevar a un nuevo jugador a Can Barça.
En los últimos meses han sonado un gran número de futbolistas para reforzar el cuadro blaugrana, desde Dani Olmo hasta Raheem Sterling, pasando por Paul Pogba, Jules Koundé, Kingsley Coman o Brozovic, entre otros tantos, pero hay que tomar en cuenta la complicada realidad del club y las dificultades para conseguir a un fichaje de alto nivel, sea quien fuese, y el límite salarial juega el papel más clave para los culés. El 'techo' impuesto por LaLiga es de menos de 98 millones de euros y la plantilla actual 'cuesta' 470 millones, según las cifras oficiales que ha ofrecido el Barça. Lo que significa que los catalanes exceden el tope en alrededor de 372 'kilos'.
Al superar el límite salarial, LaLiga ofrece una 'ventana' a los clubes para fichar, pero con muchas limitantes. Se trata de la regla '1 a 4', la cual establece que por cada cuatro euros liberados en ventas con plusvalías y rebajas salariales, se podrá destinar uno a la inscripción de un jugador. Esto fue lo que evitó la renovación de Leo Messi, porque si el argentino iba a cobrar 40 millones al año, el Barça tenía que liberar cuatro veces esa cantidad, es decir, 160 'kilos'. La regla seguirá vigente para los culés en enero, verano... Y tal vez por mucho más tiempo.
Con esta situación, al Barça se le complica cualquier fichaje, a pesar de que el club, con las salidas del verano, quedó con un saldo de +20 que puede ser destinado a las incorporaciones y renovaciones (ya se han concretado las de Ansu Fati y Pedri González), por lo que la cifra se ha ido reduciendo. Esto quiere decir que, si Dani Olmo, Sterling, Pogba o cualquier objetivo del Barça, pudiese llegar al Camp Nou, tendría que ser por una cifra muy, muy baja (incluyendo salario).
En caso de que, en cuestión, llegue un nuevo jugador al Barça, el club seguirá excediendo el límite salarial y, aunque desde LaLiga han anunciado que este año no habrán consecuencias para los clubes que lo superan (por el Covid-19 y sus estragos), la próxima temporada sí lo habrán. ¿Cuál sería esa consecuencia? Que lo que excede este año el cuadro culé se reste al tope salarial del año que viene... menos 372 millones.
Situación límite para el Barça
Desde el club mantienen la esperanza de poder reforzar la plantilla con jugadores de calidad, pero la única opción es seguir rebajando la masa salarial drásticamente para poder tener margen de acción. Joan Laporta y compañía tienen que 'deshacerse' de muchos futbolistas y obtener plusvalías de las operaciones para 'soñar' con un buen fichaje en enero o verano. Es la única forma, porque pese a que Javier Tebas anunció que en el Barça "tienen sobre 20 millones de euros para fichar jugadores", la regla '1 a 4' limita todas las acciones del club en lo que a traspasos respecta. En ese caso, el jugador (con su salario) tendría que costar 5 millones al año, para que 'quepa' en ese monto al que se refiere el presidente de la patronal.
A eso hay que añadirle la indemnización de Ronald Koeman y la inscripción del nuevo cuerpo técnico del Barça, dirigido previsiblemente por Xavi Hernández. LaLiga tiene una regla del 4% del límite para inscribir al nuevo cuerpo, pero para los azulgrana no superaría los 3,9 millones. Eso, si se hubiese contratato en el comienzo de la temporada. Ahora, la cifra ronda los 2,9 'kilos'... Y el FC Barcelona está en búsqueda de la fórmula mágica para resolver sus problemas con muy poco dinero. Un día más en Can Barça.