El verano de 2020 será muy complejo para el FC Barcelona, pero sus prioridades en el mercado de fichajes están claras. Más allá de algún 'tapado' y de las modificaciones que puedan producirse en la portería o la defensa, los nombres subrayados en rojo en su agenda son los de Lautaro Martínez y Miralem Pjanic, que se han colocado incluso por encima de un Neymar que podría ser valorado al final de la ventana estival.
Ninguna de las dos operaciones es sencilla, pero los culés tienen confianza porque ambos futbolistas juegan a su favor. El hecho de tener contrato en vigor -y en uno de los casos, incluso cláusula de rescisión- dificulta lo que podría cerrarse como un intercambio, pero la decisión está tomada y ambas negociaciones apuntan en dirección al Camp Nou. Ni el delantero ni el centrocampista están pendientes de otras alternativas.
Aunque en público guarda silencio, el de Bahía Blanca se ha desmarcado de la renovación que buscaba el Inter de Milán. En el Giuseppe Meazza abonaron 25 millones de euros al Racing de Avellaneda en 2018 y, quizá porque sabían lo que tenían entre manos se cubrieron las espaldas. Una vinculación larga -hasta 2023- y un precio fijo de 111 millones de euros para todo aquel que quiera hacerse con sus servicios.
Mientras los azulgrana y los 'nerazzurri' discuten el traspaso, el argentino ha cerrado la puerta al resto de sus pretendientes. La prensa de diversos países ha revelado movimientos de Manchester City, PSG y Real Madrid, y ni siquiera la sospechosa insistencia de los 'merengues' ha obtenido una respuestas positiva. En todos los casos han vuelto sabiendo que el acuerdo entre el crack y el Barça podría incluso estar sellado.
Prácticamente la misma situación se ha repetido con el de Tuzla que también echa balones y ofertas fuera. De nuevo los galos, además del Chelsea, han realizado algún acercamiento, pero el bosnio no se deja seducir. Antes de llegar a la Juventus, su camino se cruzó en varias ocasiones con el de los catalanes y nunca acabaron en el mismo. Ahora está dispuesto a forzar la máquina para que su encuentro se produzca.
El Barça debe rematar la faena
Si los grandes no se han echado atrás es porque saben que el Barça debe rematar la faena, y que tiene que cerrar a Lautaro y Pjanic. La oportunidad del resto pasará por unas negociaciones rotas con los lombardos o los piamonteses, con mentalidades distintas respecto a sus estrellas. Aunque los interistas apostarían por quedarse con el ariete, la 'vecchia signora' necesita deshacerse del balcánico, y aprovecharía otra de las propuestas que maneja o propondría otros trueques a los que estén interesados.