El ataque es sin duda la línea más débil del Real Madrid al día de hoy después de las salidas de Karim Benzema, Marco Asensio, y en menor medida las de Hazard y Mariano. Eso ha dejado a Vinicius y Rodrygo como los grandes referentes para crear peligro en el equipo de Carlo Ancelotti, sumando este verano a Brahim, Joselu y Arda Güler, aunque no parece suficiente para encarar una nueva temporada.
A pesar de la insistencia de Florentino Pérez en esperar a Kylian Mbappé para el 2024, la realidad es que el técnico italiano sigue creyendo que un delantero centro es una prioridad inmediata para los blancos. Por ello, 'Sky Sports' ha asegurado este miércoles que si el fichaje del francés falla este verano, ante su insistencia de cumplir el año de contrato que le resta, el míster tiene claro que el nombre que debe colocarse sobre la mesa es el de Dusan Vlahovic.
Posible 'efecto dominó' en el mercado de delanteros en Europa
La información apunta que el delantero de Serbia es el 'tapado' que podría aparecer si es que la operación por Mbappé no llegase finalmente a buen puerto, teniendo en cuenta que desde París las novedades parecen señalar la continuidad del campeón del mundo. El problema de esta alternativa para Florentino es que Vlahovic solo dejará la Juventus en caso de que llegue una gran oferta, teniendo al propio PSG y al Chelsea como rivales directos en esta 'carrera'.
Y es que la propia Juve está interesada en el fichaje de Romelu Lukaku, una situación que ha hecho que el equipo londinense incluya en su agenda a Vlahovic, un perfil de futbolista que al día de hoy genera muchas dudas en la afición del Madrid. Los seguidores merengues parecen pensar que Dusan sería un nuevo Jovic y prefieren apostar todas las fichas a Mbappé, sabiendo además que en 2024 ya está asegurada la llegada de Endrick.
El verano avanza y el Madrid sigue con muy pocas certezas
Todo parece indicar que solo el tiempo dirá qué ocurre y si Mbappé es realmente una opción viable para este mercado de fichajes, sabiendo que el PSG quisiera vender al jugador antes del 31 de julio para ahorrarse el primer pago de su cláusula de fidelidad (80 millones totales). Sin embargo, los galos dependen enteramente del jugador, por lo que Ancelotti prefiere insistir en tener un 'plan B' a la mano ante la posibilidad de que el francés pueda decidir renovar o mantenerse en su idea de salir en 2024.