El FC Barcelona ha dado un importante paso en la operación salida de este verano llegando a un acuerdo con el Zenit de San Petersburgo para el traspaso de Malcom. El futbolista brasileño, después de una temporada sin apenas tener oportunidades, buscará nuevos retos en el campeonato ruso, en el que será recibido como una gran estrella.
El verano pasado, Malcom llegó al FC Barcelona procedente del Girondins de Bordeaux a cambio de 41 millones de euros. Un año más tarde, el jugador paulista volverá a cambiar de aires -después de no haber tenido todos los minutos que hubiese deseado- a cambio de una cantidad similar: 40 millones de euros fijos más otros cinco en variables.
Dicha cantidad no solamente supone un soplo de aire fresco para las arcas del FC Barcelona -después de los 241 'kilos' gastados en los fichajes de Frenkie de Jong, Antoine Griezmann y Neto- sino que se sitúa como la cuarta venta más cara en la historia del club azulgrana. Solamente tres futbolistas se han vendido a un precio superior al del brasileño.
Paulinho (al Guangzhou por 47,5 millones)
Paulinho Bezerra abandonó el FC Barcelona el pasado verano para marcharse al Guangzhou Evergrande por 47 millones y medio de euros. Su caso guarda paralelismos con el de Malcom: ambos brasileños llegaron al Camp Nou por una elevada cifra y decidieron cambiar de aires apenas un año después con el club sacando una cantidad ligeramente superior a la de su llegada. En el caso de Paulinho fueron 40 'kilos'.
Figo (al Real Madrid por 60 millones)
Aunque no fue la más cara, la marcha de Luis Figo fue la más explosiva de la historia del FC Barcelona. En el año 2000, después de que Florentino Pérez ganase las elecciones del Real Madrid con el portugués como reclamo electoral, pagó la cláusula de rescisión del entonces capitán azulgrana. Al contrario de las marchas de Malcom y Paulinho, esta se produjop contra la voluntad del club culé.
Neymar (al PSG por 222 millones)
Si el 'caso Paulinho' tenía paralelismos con el de Malcom, el de Neymar los tiene con el de Figo, ya que el Paris Saint-Germain pagó su cláusula de rescisión de 222 millones de euros y el club catalán no pudo hacer nada para evitarlo. El brasileño protagonizó la venta más cara no solamente de la historia del FC Barcelona, sino en la historia del fútbol. Fue en 2017 y sigue sin superarse dicha marca.