El FC Barcelona lleva varios meses en la búsqueda de un relevo de garantías para Sergio Busquets y lo ha encontrado en Oriol Romeu. El futbolista tiene atributos que convencen a la dirección deportiva y también al cuerpo técnico, además de contar con un valor de mercado asequible que se adapta a las condiciones económicas que atraviesa la entidad.
Romeu es un futbolista de la casa
Los azulgrana le consideran una incorporación importante por diferentes motivos. El primero de ellos es que se formó durante siete temporadas en las categorías inferiores del Barça y conoce de primera mano el estilo de juego, algo que facilitará en gran medida su adaptación al esquema de Xavi Hernández.
Sumado a ello, llega a la Ciudad Deportiva después de una gran campaña en el Girona, donde fue titular absoluto y un referente en la medular. A sus 31 años, tiene la experiencia necesaria para ordenar al equipo desde la posición de pivote y dar ese pase clave entre líneas que conecte a la defensa con el frente de ataque.
Inteligencia y juego al primer toque
También cuenta con un factor que gusta mucho al míster y es su capacidad de juego al primer toque. Es importante recordar que en Barcelona el movimiento rápido del esférico es fundamental para las transiciones entre los centrocampistas y los dos extremos, lo que garantiza que el sistema se mantendrá en la misma dinámica que la campaña pasada.
Por último, Romeu destaca por su inteligencia en defensa para frenar las avanzadas rivales. Más allá de que su rol en el Estadio Olímpico Lluís Companys sea el de organizar el equipo, también brilla su capacidad para cortar los contragolpes y recuperar balones en beneficio de la posesión de juego. Así las cosas, se espera que su aterrizaje en la Ciudad Condal sea la próxima semana justo antes del viaje de pretemporada por los Estados Unidos.