El comienzo de temporada de Antoine Griezmann está lejos de haber sido bueno y en Francia ya apuntan que podría marcharse del FC Barcelona en junio de 2020. Pero la información del diario 'Le10 Sport" va más allá e incluso apuntan su destino en un trueque bomba que podría sacudir el próximo mercado de fichajes.
Según el medio francés, el delantero galo podría marcharse al Paris Saint-Germain y Neymar Jr acabaría en el FC Barcelona. Los parisinos, como no podía ser de otra manera después de sus demandas este pasado verano, también pedirían una cantidad de dinero en efectivo para dejar salir a su estrella.
Parece que Neymar todavía sigue teniendo en la cabeza una idea fija: salir del PSG y volver al Barça. A pesar de su gran comienzo de campaña en París y de haber decidido enterrar el hacha de guerra con el club, el delantero no se habría olvidado de los culés. La voluntad de Ney choca con la demanda que hay interpuesta contra el Barcelona que ha acabado en los tribunales.
En Francia señalan que el hecho de que Griezmann haya empezado el curso tan flojo podría hacer que el conjunto barcelonista intente colocarle en el PSG. En París, al contrario que en el Barça, Thomas Tuchel sí podría encontrarle acomodo de segundo delantero o de extremo derecho, ya que en la izquierda podrían jugar Kylian Mbappé, Sarabia o Di María.
Aunque esto no deja de ser un rumor, a día de hoy podría tener sentido futbolísticamente hablando. El '17' no es extremo zurdo y no lo va a ser nunca, con lo que difícilmente vaya a aportar lo que podría dar de jugar en su posición ideal. Neymar, en cambio, toda la vida ha jugado en esa posición, conoce el Barça, tiene muchos amigos en el vestuario y estaría adaptado desde el minuto uno.
La apuesta del Barça es Griezmann
Pero a pesar de todo esto, si algo ha dejado claro el club es su apuesta clara por Griezmann. El francés fue el primer y gran objetivo del verano y el Barça ha puesto muchas esperanzas en él de cara a esta temporada y a las que vendrán. En el conjunto blaugrana, quizás, no tuvieron en cuenta lo mucho que le iba a costar adaptarse al costado izquierdo, pero tanto la cúpula directiva como Valverde van a tener paciencia con el ex rojiblanco.