En los últimos meses se han intensificado los rumores de los posibles fichajes del FC Barcelona de cara a la temporada 2022-2023. La irregularidad del equipo ha obligado a los culés a tener presencia en el próximo mercado, pero la realidad económica no invita al optimismo, sobre todo porque la entidad azulgrana viene con un límite salarial muy negativo que complica cualquier operación.
A mitad de marzo se confirmaba que el Barça había pasado de tener un límite salarial de 97.942 millones de euros a uno negativo de menos 144.353 después del mercado de fichajes invernal. El conjunto azulgrana, merece destacar, es el único equipo, de Primera y Segunda División, con un límite negativo. Como el club excede el tope salarial, solo está en condiciones de inscribir a nuevos futbolista valiéndose del artículo 100.
Desde hace un par de veranos, la regla '1 a 4' y '1 a 2' se habían convertido en los mejores aliados del Barça, pero ahora los blaugrana se enfrentan a una modificación que será un gran golpe a las intenciones del club de reforzar la plantilla de cara al verano. En cualquier caso, hay que recordar que la primera regla se refería a que por cada cuatro euros liberados con una venta con plusvalías o rebaja salarial, puede utilizarse uno para inscribir a un jugador.
La segunda era la más importante: La '1 a 2', se utilizaba en jugadores que representan el 5% del costo total de la plantilla y permite usar la mitad de lo que se libere con su venta/rebaja salarial. Es una regla que se queda en el pasado, puesto LaLiga la ha eliminado y, por este mercado de fichajes de verano, la ha reemplazado por una nueva normativa que es bastante complicada de cumplir a la hora de inscribir nuevos futbolistas.
Y es que ahora, si se vende o libera masa salarial con jugadores que suponen el 5% de la masa salarial, el club solo podrá destinar el 33% de lo ahorrado para la inscripción del nuevo jugador, es decir, de tres euros ahorrados, se puede utilizar uno. LaLiga ha especificado que esta normativa desaparecerá a partir del 1 de septiembre de 2022, por lo que posteriormente solo quedará en vigor la del 25%.
En un ejemplo práctico, si el Barça vende a Òscar Mingueza por 20 millones de euros, podrá aplicar la regla '1 a 4, puesto el canterano no representa el 5% de la masa salarial de la plantilla. Así pues, de esa venta el club solo podría utilizar cinco 'kilos'. Por el contrario, en el caso hipotético de que los blaugrana vendiese a Jordi Alba, los blaugrana sí podrían aplicar la regla del 33%.
Es decir, si el Barcelona vende al lateral izquierdo por 30 millones de euros (por ejemplo) aplicando la normativa, los azulgrana solo podrían disponer de 9,9 'kilos' para generar fair play financiero. Cifras muy bajas para lo que la dirección deportiva quiere de cara al mercado de fichajes de este verano.
Oxígeno para los clubes de LaLiga
En otro apartado de la nueva normativa que ha presentado LaLiga está que el impacto por Covid-19 en el límite salarial se dividirá en las próximas cinco temporadas, con el objetivo de que las grandes pérdidas no penalicen a los clubes únicamente en este periodo. La patronal ha determinado que se distribuirá en un 15% en 2022-2023, un 20% en 2023-2024 y 2024-2025, respectivamente, y un 22,5% en 2025-2026, como se explica en '2playbook'. "Si un club tuviera unas pérdidas atribuibles a la Covid por 10 millones entre 2019 y 2022, ese importe ya no se restaría en su totalidad a 2022-2023, sino que en la próxima temporada sólo serán 1,5 millones", destacan.
El caso del Barça no es particularmente positivo o esperanzador, puesto que las pérdidas de la entidad azulgrana no son totalmente ocasionadas por el impacto de la pandemia en el club, sino por la "limpieza de balance que aplicó la junta directiva de Joan Laporta al llegar, cargando costes extraordinarios por 250 millones de euros entre la amortización anticipada del valor de varios futbolistas y provisiones por riesgos legales", tal y como establecen en la fuente antes mencionada.