El Barça continúa trabajando en la 'operación salida' y ahora es Neto Murara quien se une a la extensa lista de bajas. Después de las cesiones de Clément Lenglet y Francisco Trincao, junto a los traspasos de Òscar Mingueza y Riqui Puig, será el guardameta el que vestirá una nueva camiseta durante la campaña 2022/23.
A pesar de que todavía le resta un año de contrato, el FC Barcelona le comunicó que debía buscar un nuevo destino ya que Xavi Hernández no le tenía en sus planes de presente y futuro. De hecho, el brasileño no fue convocado a la gira por los Estados Unidos para que encontrara un equipo que se interesara en sus servicios. Entre todas las opciones que barajó, entre ellas Celta y Napoli, ha sido el Bournemouth quien terminó por convencerle.
El recién ascendido a la Premier quiere reforzarse y sumar piezas con experiencia, por lo que Neto es un jugador que cumple con lo necesario para el proyecto. Además, el Barcelona le ha permitido marcharse gratis con la carta de libertad debajo del brazo, lo que le garantiza terminar de cobrar en Inglaterra el dinero restante en su contrato.
Neto llegó a la Ciudad Condal en 2019 en una operación de intercambio con el Valencia por Jasper Cillessen, que según apunta el diario 'SPORT', no fue más que una maniobra de la anterior Junta Directiva para maquillar las cuentas y no tener pérdidas al final del curso. En sus tres campañas como culé disputó 21 compromisos, unos números muy pobres en comparación a los 80 que jugó en el conjunto 'ché'.
Sucesiones
La partida del 'canarinho' hará que ocurra un efecto dominó en las filas del cuadro catalán. Iñaki Peña, que regresó de su cesión en Turquía, será el nuevo relevo de Ter Stegen, mientras que Arnau Tenas alternará sus convocatorias entre el filial y el primer equipo como tercer meta. Sumado a ello, el club se ahorraría cerca de 5 millones de euros en su ficha, algo que ayudará a la dirección deportiva a inscribir a todas las nuevas incorporaciones.