El FC Barcelona deshoja la margarita con su ‘operación salida’. Para el club es clave completar la venta de dos jugadores en la próxima semana y, así, tener el terreno listo para la posible incorporación de Joao Cancelo, por el que se negocia una cesión con opción de compra. Los grandes señalados son Clément Lenglet y Sergiño Dest, pero hasta ahora han sido un auténtico quebradero de cabeza para la dirección deportiva azulgrana.
Con el internacional con Estados Unidos la historia ha sido muy complicada. Regresó de su cesión en el AC Milan este verano y, desde entonces, se le ha estado buscando un nuevo destino sin éxito. Ha recibido varias propuestas desde la Major League Soccer (MLS), pero no quiere marcharse de Europa. Cree que está en condiciones de seguir rindiendo al máximo nivel y no valora la posibilidad de jugar en Estados Unidos o en Arabia Saudí. El problema es que, hasta ahora, ningún equipo ‘grande’ había mostrado voluntad en ficharle.
El PSV entra en acción
Los catalanes se han dado margen de una semana para intentar desbloquear la salida del lateral derecho. No quieren que, como ya pasó el verano pasado, su caso se extienda hasta el 31 de agosto, por lo que le han insistido en que encuentre un nuevo equipo. A pesar de que se ha rumoreado, no apostarán por la rescisión de su contrato, puesto es una medida que traería más problemas que soluciones para el club
En medio de la incertidumbre, la agencia neerlandesa ‘ED’ ha informado que el PSV se ha mostrado interesado en hacerse con los servicios de Dest para esta temporada. La opción que estará sobre la mesa será la de un préstamo por un año, pero no descartan que pueda ser un traspaso permanente para ‘facilitar’ las negociaciones con el Barça. Los próximos días serán clave para definir si la operación tiene ‘futuro’ o solo se trata de un interés tímido por parte de los neerlandeses.
Dest, sin hueco en el Barça
Lo cierto es que desde la Ciudad Condal apurarán todas sus opciones para que Dest salga este verano. No entra en los planes de Xavi Hernández y, de hecho, no ha sido inscrito en LaLiga (al igual que Clément Lenglet), por lo que no tiene opciones de jugar partidos oficiales. Es consciente de que está en la rampa de salida y que regresar a Países Bajos para jugar en la Eredivisie, una Liga que conoce muy bien y en donde ya se destacó antes de recalar en el cuadro azulgrana, puede ser la oportunidad de oro para reconducir su carrera futbolística.