La estelar actuación de Fermín López en los Juegos Olímpicos de París con España le ha ratificado como uno de los jugadores con mejor proyección de la plantilla azulgrana. El de El Campillo viene de disputar 43 partidos (1.948 minutos) la temporada pasada bajo las órdenes de Xavi Hernández, sumando 11 goles y 1 asistencia, siendo uno de los mejores revulsivos del equipo durante todo el curso. Este año debe ser el de su asentamiento en la élite, para lo cual necesita dar un paso al frente apenas regrese de sus breves vacaciones.
Junto a Pau Cubarsí y Lamine Yamal, el jugador de 21 años fue la gran sorpresa de la 23-24, exhibiendo carácter y talento cada vez que saltó al campo. Luis de la Fuente premió su buen momento llevándole a la Eurocopa, donde pudo disputar un partido y levantar el trofeo en Berlín. Después, se destapó con los de Santi Denia en París (hizo 6 goles en el torneo), liderando a La Roja hacia la obtención de su segundo oro olímpico. En ese sentido, Hansi Flick espera aprovechar al máximo el gran momento del canterano, si bien el fichaje de Dani Olmo y el regreso de Gavi aumentan la competencia en el centro del campo culé.
La salida de Gündogan, un factor clave para la evolución de Fermín
Y es que, mientras Fermín brillaba en los JJ.OO., el Barça no dudó en ir a por Olmo, además de contemplar el fichaje de otro pivote antes del cierre de mercado. Aunque potenciar el enorme talento del '16' es una obligación para la 24/25, para ello será determinante la salida de Ílkay Gündogan. Sin el experimentado jugador alemán, el Barça pierde a una pieza clave en la gestación de juego y López, de excelente pegada y capacidad goleadora, tiene con qué cubrir la baja del '22', aunque parta nuevamente desde el banquillo. Al menos así se entiende desde la lógica de apostar por el talento de La Masia en lugar de un futbolista como Gündo, con mucha jerarquía, pero en la recta final de su carrera.
De momento, Flick tiene en Pedri al cerebro del equipo, a la espera de ver dónde encaja mejor el ex jugador del RB Leipzig. También está pendiente el regreso de Frenkie de Jong, otro de los que estará en el once cuando se recupere totalmente. En cualquier caso, Fermín debe ser importante, sobre todo en partidos donde se dependa de la pegada y el olfato goleador para lastimar al rival, dos atributos que el de El Campillo sabe explotar a la perfección.