Nico Williams es el principal protagonista del mercado de fichajes del FC Barcelona. El navarro se consagró como una de las grandes revelaciones de la Eurocopa 2024, y aunque la entidad azulgrana ya le tenía en el radar, el rendimiento mostrado en el torneo continental por el futbolista terminó de convencer al club, que le marcaron como la gran prioridad para reforzar el ataque del equipo de Hansi Flick en la presente ventana estival.
Su operación no será sencilla, ya que el Athletic Club de Bilbao demanda el pago íntegro de su cláusula de rescisión, la cual está valorada en 58 millones de euros. El portal digital 'Relevo' informó que, en orden de concretar el aterrizaje del atacante en la Ciudad Condal, los catalanes deberán conseguir el dinero necesario, objetivo que se puede lograr cerrando el contrato con Nike y obteniendo los fondos que Libero no pagó.
Hasta que en Can Barça no cumplan con este requisito indispensable, no se espera ningún movimiento en torno al menor de los Williams. Sin embargo, la fuente anteriormente mencionada sostuvo que los blaugranas ya habrían alcanzado un acuerdo con Nico. Tanto el Chelsea como el Arsenal le ofrecerían más dinero, pero la institución catalana cree que si consigue regresar a la regla 1/1, el delantero decidiría poner rumbo a Barcelona.
Por su parte, el 'MVP' de la final de la Eurocopa priorizaría su llegada al Spotify Camp Nou antes de llevar sus talentos a la Premier League. Nico Williams tendría claro que, en caso de abandonar San Mamés, lo haría solo para vestir la camiseta azulgrana, pese a la insistencia de los dos clubes de Londres. El futbolista vería con buenos ojos jugar al lado de su amigo Lamine Yamal, escenario que gusta mucho en el club, ya que el objetivo es construir un proyecto ganador en torno al de Rocafonda y el fichaje de Nico sigue esa línea.
El plazo que se marca el Barça
La idea de la entidad blaugrana es conseguir la incorporación del extremo a la plantilla de Hansi Flick antes de que este se una a la pretemporada del Athletic Club. Por ello, la última semana de julio y la primera semana de agosto podrían ser claves en la operación. Desde las oficinas barcelonistas trabajan para conseguir este objetivo, y el positivismo crece cada día que pasa.