El FC Barcelona necesita continuar su 'operación salida' para liberar la masa salarial y el vestuario, en general. Es una tarea más que complicada para los directivos azulgrana porque no hay muchas llamadas por los jugadores 'imprescindibles' del Barça, pero continuarán insistiendo para conseguir uno de los grandes objetivos de Joan Laporta en su segundo mandato en el conjunto culé: llevar a cabo una exhaustiva limpieza del vestuario para quedarse con lo justo y necesario para la próxima campaña.
A los blaugrana también los 'atormenta' el límite salarial, que se verá drásticamente reducido en la próxima campaña. De allí que para los dirigentes en Can Barça sea totalmente urgente darle salida a una gran lista de jugadores, más allá de Miranda (Betis), Konrad de la Fuente (Marsella) y Matheus Fernandes, del que Laporta prescindió su contrato de forma unilateral. Así pues, se espera que en las próximas semanas el club pueda despedirse de unos cuantos futbolistas. A continuación, repasamos los jugadores que podrían ser las 'víctimas' de los culés:
Limpieza en la zaga defensiva
A pesar de que el Barça se 'rindió' en la búsqueda de un central zurdo, porque no están en condiciones de asumir un traspaso, el plan de los azulgrana es más que claro: varios defensores saldrán este verano. El que está más próximo a hacer sus maletas es Junior Firpo, quien tiene una oferta del Leeds United. El lateral izquierdo, que no ha triunfado en la Ciudad Condal, se marchará por 15 millones de euros en los próximos días. A su vez, también están en la mira Clément Lenglet y Samuel Umtiti, con quienes el club no cuenta y han demostrado estar a cien años luz del nivel requerido para jugar en el conjunto azulgrana.
Sin embargo, el gran inconveniente para Laporta y compañía es que ambos se niegan a dejar el club y tampoco hay muchos interesados en sus fichas (muy elevadas, además). En los últimos días surgió la oportunidad del traspaso de Umtiti al Marsella, en calidad de préstamo, pero la operación se enfrió. De cualquier forma, el Barça continuará presionando e insistiendo en sus salidas, a pesar de que se estarían quedando sin un central zurdo natural. Por último, también está el caso de Sergi Roberto, quien no tiene un futuro decidido y está bajo contrato hasta 2022. El catalán ha sembrado muchas dudas y, si surge una oportunidad, el club no dudará en venderlo.
Los centrocampistas 'sacrificados'
Miralem Pjanic es uno de los que también está cerca de hacer sus maletas, aunque todavía no se conoce qué equipo se hará con su ficha. Ha sonado la Juventus, París Saint-Germain o Inter de Milán, pero la realidad es que su futuro es una incertidumbre. Lo único que si es seguro es que el Barça espera 'deshacerse' de él un año después de su llegada al Camp Nou y prefieren un traspaso definitivo, pero también aceptarían una cesión por una temporada, con la posibilidad de incluir una cláusula de compra obligatoria.
Por otra parte, también está sobre la mesa el caso de Riqui Puig, quien aunque tiene ánimos de seguir luchando por un puesto en el equipo, cuenta con un panorama complicado porque Ronald Koeman no cuenta con él. Hace unos días había salido la opción del Granada, que también está interesado en Carles Aleñá (cedido en el Getafe), así que habrá que ver si el club decide mantenerle o 'aprovechará' un posible movimiento del canterano este verano.
Salidas urgentes en la delantera
En la zona ofensiva es donde el Barça tiene más jugadores (nueve en total) y menos plazas para disputarse (dos o tres, máximo). Hay unos que son intocables, pero otros tantos están en el mercado. Los más evidentes son Phlippe Coutinho, Martin Braithwaite y Francisco Trincão. En el caso del brasileño, aún no se conoce mucho de su evolución física, tras su lesión en el menisco que le ha mantenido apartado del terreno de juego desde finales de diciembre, pero el Barça espera conseguirle un equipo. El Milán ha sido el último en sumarse a la lista de interesados.
El danés, por su parte, está revalorizándose en la Eurocopa y su futuro está, probablemente, en la Premier League, aunque el conjunto azulgrana todavía no tiene prisas para concretar su fichaje. En el caso del extremo portugués, la situación sí es delicada porque desde el Camp Nou hay cierta confianza en su figura. Le ven como un jugador con mucho potencial y que puede ser determinante en el futuro, pero si llegasen a recibir una oferta por él no se lo pensarán mucho.