El FC Barcelona quiere cerrar, tan pronto como sea posible, la incorporación de Joao Cancelo. A pesar de que no se ha conseguido el acuerdo definitivo con el Manchester City para el traspaso en calidad de préstamo del jugador portugués, sí que está muy avanzado y pendiente de, únicamente, flecos. Los azulgrana confían en que la operación llegará a buen puerta. El problema es el cuándo, puesto ya se ha extendido más de lo previsto.
Todo parecía indicar a que la operación iba a desencallarse durante esta semana. Joao, de hecho, recibió el permiso del conjunto inglés para ausentarse de los entrenamientos durante estos días mientras resolvía su futuro. Está en Portugal a la espera de la llamada para viajar a la Ciudad Condal y pasar su reconocimiento médico. Esperaba recibirla durante el viernes, pero ha sido imposible.
La cesión de Joao Cancelo no corre peligro
Tal y como apunta el periodista especializado en el mercado de fichajes, Fabrizio Romano, la operación se retrasará hasta los últimos días de la ventana de transferencias. Lo más probable es que pueda cerrarse el 29 o 30 de agosto, pero desde el Barça mantienen la tranquilidad porque la operación, en cuestión, no está en peligro. Cancelo llegará y se vestirá de azulgrana esta temporada, solo que tardará más de lo previsto en ser anunciado.
Sin lugar a dudas, el retraso en el pago de los 20 millones de euros por parte de Libero Finance Football, a razón de la reventa de un porcentaje de Barça Vision, ha trastocado los planes de los culés. La previsión era que el depósito llegase antes de este viernes y, de momento, no hay noticias. Además, tendría que producirse un segundo pago -del mismo monto- con fecha límite del 29 de agosto, pero si no se ha producido el primero... se encienden más, si se puede, las alarmas.
La renovación de Ter Stegen no es suficiente
Al margen de lo que pueda pasar con el fondo inversor alemán, el Barça ha estado trabajando en otras operaciones que le permitan ahorrar en su masa salarial y Fair Play. La renovación de Marc-André ter Stegen hasta 2028, después de acceder a diferir un porcentaje de su salario en los próximos dos años, es uno de los movimientos más importantes, pero sumado a lo que se liberó de la salida de Sergiño Dest al PSV y lo que pueda pasar con Clément Lenglet, solo alcanzaría para las inscripciones de Iñigo Martínez e Iñaki Peña.