Roma y Barça pueden volver a verse enfrentados por un fichaje

El fichaje de Malcom por el FC Barcelona sigue levantando ampollas en la Roma, que tenía prácticamente cerrada la operación de la incorporación del delantero brasileño y que, incluso, llegó a hacerla oficial mediante sus redes sociales. Tras la indignación en la capital italiana, el club catalán y el romano pueden verse enfrentados por un nuevo fichaje.

Rastreando el mercado de fichajes, nos encontramos con la figura de Steven N'Zonzi, un corpulento mediocentro defensivo que es un auténtico portento físico en tareas de recuperación de balón pero que también posee una capacidad muy refinada para distribuir el juego del equipo en la medular. Incluso también tiene llegada, algo que le hace ser muy completo.

Tras la negativa del Manchester United a vender a Paul Pogba, en la secretaría técnica del FC Barcelona se habrían fijado en el centrocampista del Sevilla para convertirle en el último refuerzo del verano. No obstante, Monchi, director deportivo de la Roma, también quiere hacerse con sus servicios y ya ha establecido contactos con el club hispalense, por lo que puede revivirse un nuevo episodio entre ambos clubes tras el 'caso Malcom'.

N'Zonzi cuesta 40 millones

La inflación en los precios de los fichajes ha hecho que, durante las últimas temporadas, se hayan pagado barbaridades por jugadores que no valían el desproporcionado coste que se pagó por ellos. Algo que deja los 40 millones de euros de la cláusula de rescisión de N'Zonzi con el Sevilla en una cantidad más que razonable por un futbolista de su talento.

A sus 29 años -cumple 30 en diciembre- y después de convertirse campeón del mundo con Francia en el Mundial de Rusia, en el que tuvo un papel importante de revulsivo, le llega una de sus últimas oportunidades para triunfar en un equipo grande. El FC Barcelona sería una opción importante para relanzar su carrera, pero la Roma también estará atenta.

Pros y contras del fichaje de N'Zonzi

Puntos positivos

N'Zonzi es una apuesta segura en cuanto a rendimiento inmediato. Se trata de un jugador de una enorme talento que está en el mejor momento de su carrera, tal y como demostró en el Mundial de Rusia -era de las primeras opciones de Deschamps mirando al banquillo- y como lo hizo temporadas pasadas con el Sevilla.

Se trata de un jugador consagrado a nivel mundial y que sabe lo que es competir en la LaLiga, por lo que el periodo de adaptación prácticamente ni existiría. En el club hispalense ha dado muy buenos resultados y en el FC Barcelona ocuparía un sitio parecido al que ocupa con Francia: de jugador revulsivo para dar presencia en el centro del campo.

Otro de los pros importantes es su versatilidad. Steven N'Zonzi une una espectacular corpulencia -mide 196 centímetros- con un talento importante con la pelota en los pies. A nivel defensivo es tácticamente muy bueno, además de tener un despliegue físico importante y un juego aéreo imponente. Además, pese a ser un jugador más defensivo, suma una media de unos 3-4 goles de media por temporada.

Puntos negativos

Uno de los contras importantes del fichaje de Steven N'Zonzi es que el Sevilla se niega a negociar por él. Su cláusula de rescisión es de 40 millones de euros y el club hispalense actuará con el centrocampista galo como ya hizo con Clément Lenglet: esperando a que paguen su cláusula sin ofrecer ni una mínima rebaja.

Otro de los problemas sería la edad: el Barça pagaría mucho dinero por un jugador de 29 años que cumple los 30 en diciembre. Tratándose de un jugador cuyas grandes cualidades son la fuerza y la potencia, se trataría de una apuesta arriesgada gastar demasiado por un fichaje de poco recorrido. N'Zonzi daría rendimiento inmediato, pero sería complicado amortizarle.

Otro de los puntos negativos de su incorporación sería que taparía la progresión a centrocampistas de la Masia que vienen apretando fuerte como es el caso de Carles Aleñá, Oriol Busquets o Riqui Puig. Normalmente, cuando las jóvenes promesas ven que se confía antes en los fichajes que en ellos mismos, optan por marcharse.