Jean-Michaël Seri era el gran objetivo del FC Barcelona en verano después de que se descartara la incorporación de Marco Verratti. Sin embargo, cuando el acuerdo ya estaba prácticamente cerrado con todas las partes, el club azulgrana decidió romper las negociaciones y no fichar al centrocampista africano del Niza. Para el jugador, fue un gran golpe moral y no guarda buen recuerdo del club catalán.
"Aunque sea el Barcelona, no quiero ser plato de segunda mesa. Sé de lo que soy capaz en un campo de fútbol y creo que he demostrado tener cualidades. Pues si me escogen, quiero que me cojan bien, que sea una prioridad, no un complemento. Es por eso que tengo la cabeza centrada en el fútbol. He soñado mucho con el Barça, pero el mensaje del Barça fue claro. Muchos habrían esperado más tiempo", comentó Seri en una entrevista a France Football.
También explicó que otros jugadores habrían utilizado a los medios de comunicación en su caso. "Algunos habrían hablado en los medios de comunicación. Para mi, un jugador habla en el campo, no en los medios. Los que hablan mucho son jugadores mediocres, que necesitan que se les conozca. Me repetí que, por un lado, había un club para el que yo no era una prioridad, y del otro, un club que me quiere. Habría sido de tontos enfadarse porque un club no te ha querido en lugar de darlo todo al que te ama", dijo.
El jugador del Niza no quiso recordar los hechos del pasado verano. "No tengo muchas ganas de recordar todo lo que pasó. Hubo un periodo complicado cuando estaba en la selección. El mercado se cerró cuando estaba en Gabón. Me concentré antes del partido en Abidjan y cuando regresé a Niza dejé eso de lado. Para mi está todo olvidado, pasé página y pensé en el partido contra el Mónaco", explicó.
Golpe anímico
Seri se vio afectado por la marcha atrás del Barcelona en su fichaje. "Eso me dejó tocado, pero tomé ese momento con perspectiva. Me concentré en lo que sé hacer, jugar a fútbol. No había otra solución ni nada mejor que volver a jugar a fútbol. Seguir igual no habría servido de nada. Admito que no fue fácil. Pero hoy no queda en mi cabeza ningún recuerdo de todo eso. Pienso en el futuro, hay muchas cosas bonitas por hacer", comentó.