La reunión de Mateu Alemany, director de fútbol del FC Barcelona, con Miguel Ángel Gil Marín, uno de los propietarios del Atlético de Madrid, ha desatado cualquier tipo de rumores. Se presume que el tema principal del encuentro fue Álvaro Morata, a quien los culés valoran como una alternativa para su delantera en caso de que finalmente no llegue Robert Lewandowski, pero no fue lo único. Antoine Griezmann también habría sido mencionado.
El directivo blaugrana destacó que no habían hablado de Griezmann, apuntando a su salida del encuentro que "no hablamos de Antoine Griezmann. Su nombre no fue parte de nuestra conversación", pero desde dicho encuentro no han cesado los rumores de una posible negociación para que el Atlético se 'libre' de pagar los 40 millones de la clásula obligatoria de compra que tienen sobre el ariete francés.
En la Cadena 'COPE' habían informado que el Atlético de Madrid se planteaba seriamente no ejecutar el segundo año de la cesión del atacante francés y, de hecho, se lo habrían comunicado al jugador y su representante. Desde el Camp Nou niegan cualquier operación que involucre a 'Grizzi'. En cualquier caso, en el Barça no temen de cualquier movimiento, puesto están convencidos de que el jugador se quedará en el Wanda Metroplitano y que recibirán su precio de traspaso.
'SPORT' ha informado este viernes que la tranquilidad es absoluta en el Camp Nou puesto el plan va como lo esperado: Simeone ha utilizado a Griezmann en el 50% de los partidos en los que ha estado disponible, por lo que se ha cumplido la cláusula que obliga al Atlético de Madrid a ejercer la opción de compra que tienen sobre el delantero.
Opciones sobre la mesa
En el Atlético, por el contrario, no está para nada tranquilo y estarían en pleno lío porque, en cuestión, preferirían que Griezmann no siguiese en el equipo. Se ha informado que la intención de los rojiblancos es reducir el precio de venta (40 'kilos') para que la operación sea más factible, aunque no se descarta que pueda completarse un trueque, con el nombre de Morata sobre la mesa. En este sentido, en vez de pagar los 40 millones de euros, el futbolista de 29 años se vestiría de blaugrana a partir de la 2022-2023.